MUY MALA SEÑAL. Debilidad e insensibilidad política extrema, el que Enrique Peña Nieto, presidente de México, por insinuaciones, abiertas presiones o intenciones de congraciarse con TELEVISA, nombre como titular de la Procuraduría General de la República a una persona tan cercana a ese poder fáctico.
Se confirma, el Ejecutivo Federal, nada sabe de historia de México y mucho menos de historia universal, si así fuera, no estaría cediendo ese espacio tan sensible de la administración pública federal, a un poder de la naturaleza y dimensiones de este medio de comunicación mexicano.
El presidente mexicano, de continuar aflojando o permitiendo que lo aflojen; terminará entregando, abiertamente, la Secretaría de Hacienda a TV AZTECA, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes a Carlos Slim y la Secretaría de Energía a cualquier grupo de extranjeros que lo amenacen con publicar todos sus secretos sentimentales, de salud y patrimoniales.
UN TERMÓMETRO. Se siente tan frío y acalambrado el presidente Enrique Peña Nieto, que necesitó de un “TUTAZO” para sentirse vivo, con calor y cariño de sus patrones y acreedores, principalmente de los GRINGOS. Nadie creía eso de que no sabían dónde se escondía “La Tuta”; que “La Tuta” por acá y “La Tuta” por allá, y que no podían agarrar a “La Tuta”.
¿SORDO O TERCO, el presidente Enrique Peña Nieto? Si ya el ex Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, se confesó, públicamente, cansado, para qué carajos nombrarlo como titular de la SEDATU? Por eso los funcionarios de gobierno, pagan mal y cobran bien.
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