En el “divorcio necesario” entre Sabines y Pablo Salazar, trasciende el reciente acomodo estratégico de la Doctora Blanca Ruth Esponda, como Subsecretaria General de Gobierno que, parece llegó para tomar el control absoluto de la política interior de Chiapas.
A nueve meses de Gobierno sin fisonomía y dinámica propias, la Subsecretaria tiene que definir una política de Estado que desarrolle responsabilidades, visión y sensibilidad social; para prever y trazar rumbo; observar realidades y desarrollar capacidades, y ; abandonar esa “política interior” que se limita a “firmar minutas”, espiar, filtrar, intrigar, perseguir, intimidar o desaparecer a “incómodos”.
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