Piensa, Prensa y Pega.

28 de julio de 2010

Reflexiones y Precisiones

El Secretario de Pueblos Indios de Chiapas, Jesús Caridad Aguilar Muñoz, bien puede ser considerado un excelente ejemplo de simulación institucional, distracción oficial y corrupción gubernamental.

El día de ayer hizo 2 meses que este Secretario del Gobierno anunciara que el 28 de mayo realizaría un “foro estatal de consulta sobre derechos de los pueblos indígenas de Chiapas”. Esta información la manejó a 8 columnas en varios medios de comunicación estatales y la “cacaraqueó” bastante, antes y después de los trabajos que anunció.

A 60 días de iniciada y concluida la reunión que se promovió en la zona arqueológica de “Toniná” en el municipio de Ocosingo, encabezada por Caridad Aguilar Muñoz, donde él calculó que asistirían unas 300 personas, y en la que prometió hacer público el contenido del encuentro y sus resultados, se sabe nada de lo que en ella sucedió: ¿Quiénes participaron?, ¿qué obstáculos encontraron?, ¿qué propusieron?, ¿a qué compromisos llegaron? y ¿qué avances tienen? Públicamente se desconoce todo.

Hace 2 meses Aguilar Muñoz dijo que los temas que discutirían y analizarían en “Toniná”, estarían relacionados con los derechos de los pueblos indígenas, el desarrollo, la tierra, el territorio y el acceso y disfrute colectivo de los recursos naturales; derechos de los migrantes, jornaleros indígenas; trabajo y seguridad social, salud y medicina tradicional, diversidad y educación intercultural; representación política de los pueblos indígenas, libre determinación, autonomía, seguridad, justicia y sistemas normativos propios y derechos de las mujeres indígenas.

Con este fraseo “académico, profundo y exhaustivo” se presentaba Jesús Caridad. Así de ambicioso lo veía y ofrecía el panista, y hasta hoy todo ha sido una obra de teatro oficial más, de las que sirven para medir “calores sociales”, distraer, penetrar movimientos, dividir comunidades y en el mismo viaje, abonar y promover la imagen de gobiernos responsables, “ocupados oportunamente” de la problemática social.

Hace 60 días Caridad Aguilar Muñoz decía: “es muy amplio el grupo de participantes en este trabajo, y con esto estamos garantizando que los trabajos que estamos llevando a cabo con la UNAM, nos van a permitir tener todos los elementos para poderle presentar al gobernador Juan Sabines Guerrero, las probables reformas a la ley indígena y que éstas puedan llegar al Congreso del estado, pensadas y creadas por nuestros pueblos indígenas”.

La reunión del 28 de mayo, que en su momento “Reflexiones y Precisiones” calificó de una acción inscrita en el programa permanente de contrainsurgencia institucionalizada, según los ofrecimientos y resultados, hasta hoy ningún beneficio real (ni virtual) ha significado para los pueblos de Chiapas, y nada en ningún sentido, ha dado a conocer públicamente la Secretaría de Pueblos Indios. Todo un fraude muy bien logrado, que se montó y desarrolló con recursos públicos para beneficio de la clase política en el poder y el partido en el gobierno.

Aguilar Muñoz no debe olvidar que, estimular “amplias” expectativas sociales, ofrecer finales prometedores, avanzar notoriamente nada, ocultar información y estar peor que al principio, es corrupción y huele a engaño oficial, de ese que se les da con mucha facilidad y exagerada frecuencia.

El proyecto de inversión que se relaciona con “El Arcotete” y “La Quinta del Obispo”, en el municipio de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, que acuerpa la delegación federal de la Secretaría de Desarrollo Social, desde un principio permitió que le acercaran ingredientes participativos que ya contaminan lo que bien pudo haber sido un buen ejemplo de organización, gestión y cooperación de las comunidades, con recursos y en beneficio directo de éstas, sin intermediarios. Como hasta hoy se desarrolla el proyecto, está pareciendo que la SEDESOL dispone de recursos federales para ayudar a la iniciativa privada coleta, donde a los campesinos, inclusive, los indujeron a ceder sus derechos comunitarios por varias décadas, sólo son incluidos como mano de obra barata y mayormente sólo son beneficiados los empresarios de siempre. No todos.

En una actitud de cinismo patológico, el Delegado Regional de la SEDESOL, Roberto Morales Ortega, declaró y se publicó en un medio de circulación estatal, que con una inversión de casi 3 millones de pesos, reiniciarían los trabajos que comenzaron en el 2009, y agregó que en la administración de los recursos participa la Asociación de Hoteles y Moteles, y dijo además que con esto “se dará un impulso para fortalecer el turismo”.

¿Para qué los indígenas necesitan a los hoteleros en la ejecución de los recursos destinados a ellos?, ¿por qué hicieron, oficialmente, que los campesinos cedieran los derechos sobre sus recursos, por 30 años, según declaración pública hecha por el coordinador operativo de la SEDESOL en Chiapas, cuya grabación obra en poder de “Reflexiones y Precisiones”?, ¿qué tienen que hacer los empresarios en el aprovechamiento racional y social de los recursos naturales propiedad de los indígenas? Y no es “fortalecimiento del turismo”, como declaró Morales Ortega, sino antes, más fortalecimiento a la clase empresarial, donde en San Cristóbal no destacan más de dos apellidos.


El Machucón

Considerando la filiación política de los principales actores de las “jornadas ciudadanas de atención”, pareció una convención estatal del PAN, donde antes de iniciar, el lugar se ambientó con música de protesta.

Por algunos elementos escénicos, podría pensarse que el PAN estaba agradeciendo el voto del 2010 y encargando el voto para el 2012.

En la “jornada ciudadana de atención”, si hacemos cuentas, 80% de los asistentes pertenecían a visibles empleados de gobierno, y no más del 20% eran “invitados a fuerzas”, curiosos o “interesados”.

“Trabajos” desorganizados de esta naturaleza, ¿Cuánto cuestan, cuánto resuelven y a quién benefician?.

Todo pareció una gran kermes con mujeres, marimba, militares y militantes, donde no faltó la escenografía indígena apropiada, y sí faltaron los tacos, tamales, chalupas, “nuégados” y “suspiros”. No pocas damas parecían ir de “shopping”.

Por qué todo esto después de casi 10 años del PAN, por qué ahora y por qué con tantas prisas, improvisaciones y frivolidades; ¿cuál es la urgencia, qué les preocupa, qué buscan?.
EL PELLIZCO:
Asistieron “Carlitos y su papi”, para atrapar cualquier oportunidad de negocios, y de pasada observar cómo “Fer”, el de casa, con voz de cohibido ministro de culto, conducía los trabajos.

La mera jefa del grupo Na Bolom, se placeaba ofreciendo besos, abrazos y los cumplidos obligados de: “que bien te vez”, “me da gusto verte” y “luego te llamo para comer”.

21 de julio de 2010

Reflexiones y Precisiones

El 16 de julio, a partir del medio día iniciaron en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, las “Jornadas Federales Ciudadanas de Atención e Información”, que duraron 3 horas y 40 minutos, las cuales se dijo, promueve y coordina la Secretaría de Gobernación, y que participarían las 52 representaciones federales en Chiapas.

En el documento escrito que se distribuyó a los medios de comunicación, con membrete del gobierno federal, se dice que las “jornadas ciudadanas de atención” son en cumplimiento a la política social del presidente Felipe Calderón y acorde a sus responsabilidades frente a los ciudadanos “en términos de atención, información, transparencia y gestión” y que fue la Secretaría de Gobernación la que definió estas “jornadas” interinstitucionales a implementarse en todas las entidades federativas.

En el documento distribuido se asienta que “el objetivo general de las jornadas federales es articular las capacidades, conocimientos y recursos de las dependencias federales y los órdenes de gobierno, para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y contribuir a la gobernabilidad democrática del país, a partir de la coordinación, la comunicación y la unidad en el desarrollo de acciones”.

También se dice, “se busca atender a los ciudadanos de manera directa en términos de gestiones o dudas, poner a su disposición los servicios de las Delegaciones Federales e informar sobre los programas que ofrecen para su oportuno aprovechamiento. Las jornadas ciudadanas son, en ese sentido, un mecanismo para acercar el gobierno a la ciudadanía”.

Igualmente señalan que “se trata de un claro esfuerzo de atención e información, que en adición abona a la gobernabilidad por medio de la resolución directa de problemas que pueden aquejar a los ciudadanos”.

Sobre todo lo anterior y por donde se le vea se pueden anotar bastantes observaciones y algunas conclusiones, que pueden ir de la forma al fondo o de lo aparente a lo esencial, da igual, el resultado es el mismo: un gran simulacro nacional que bien da para considerarlo un sinvergüenza fraude con recursos públicos, donde nada de lo que ofrecen es posible en las condiciones en que se desarrollaron los “trabajos”, y ningún beneficio social de impacto traen a los ciudadanos de este país, y particularmente a los habitantes de “los Altos de Chiapas”.

Si el gobierno federal y en especial la Secretaría de Gobernación, desean presentar y presumir atención, información, transparencia y gestión oportunas, es totalmente imposible lograrlo en 3 horas y 40 minutos, con la metodología de “trabajo” implementada y en los espacios físicos designados; no, es un quehacer que exige de los “servidores públicos”, un esfuerzo honrado, profesional y permanente hacia la sociedad, en las ciudades y el campo; demanda congruencia entre lo que se anuncia y el desempeño institucional cotidiano; exige honestidad al describir acciones y medir resultados; debe empezar con una aceptación inicial franca de que, hoy y siempre, las instituciones de gobierno “avanzan” en una dirección, mientras las necesidades y tamaño de las exigencias sociales, van en sentido opuesto y son de una magnitud mucho muy diferentes.

Expresaron que las “jornadas federales ciudadanas” pretenden articular capacidades, conocimientos y recursos de las instituciones federales, de los 3 niveles de gobierno: ¿es creíble en menos de 4 horas y al final del 4° año de gobierno? Si en este momento les pidiéramos resultados a todas las dependencias involucradas, en los términos que ofrecieron, seguro, nadie logró algo mínimamente importante en los 220 minutos de “trabajo”. Puro teatro, circo y PAN, con demasiadas minucias, hipocresías y deshonestidades que traen más daños que beneficios.

Los funcionarios federales que participaron en las “jornadas ciudadanas de atención”, hacían toda clase de intentos para contagiar su “convencimiento” de que están acercando el gobierno al ciudadano; cómo creerles, cuando era notorio el burdo montaje circense, que de lejos dejaba oler los alimentos propios a la fauna de este tipo de espectáculos; cómo admitir que el gobierno se acerca al pueblo, cuando en casi 4 años le han empeorado más el costo para vivir, y la inseguridad ha crecido descomunalmente, en todos los frentes y de todas las formas.

Dicen ellos que las “jornadas ciudadanas de atención” abonan a la gobernabilidad por medio de la solución directa de los problemas: ¿cómo solución y gobernabilidad?, ¿cómo unas frases podrían humedecer un desierto?; discurso y demagogia pura, porque seguro, aquí en “los Altos de Chiapas”, el 16 de julio resolvieron nada de la problemática sociopolítica y económica existente, y se comprometieron en los términos de siempre, a nada o un poco menos.

Por el origen de la estrategia, las “jornadas nacionales ciudadanas”, su operatividad visiblemente improvisada, forzada, hueca y llena de superficialidades, es seguro, son sólo actos de politiquería hilvanados en movilizaciones nacionales urgentes, disfrazadas de acciones gubernamentales, para medio dibujar la “presencia y confianza Institucional” que no han sabido construir en los casi 10 años que el PAN lleva como “gobierno”.

Es muy probable que, en un diseño de la Secretaría de Gobernación, todo sólo sea para acercar desesperadamente el PAN a los ciudadanos, ni más ni menos, pero, podría resultarles una acción peligrosa y totalmente contraproducente, cuando después de algún tiempo, como siempre, se vea ningún resultado de importancia y todo quede en un claro y abusivo manoseo más.

“Reflexiones y Precisiones” solicita a la Secretaría de Gobernación y a las 52 representaciones federales en Chiapas, que urgentemente den a conocer a los ciudadanos los resultados de “impacto social” que alcanzaron en esta “jornada federal ciudadana de atención e información”, caso contrario, quedará demostrado que sólo son actos políticos intrascendentes, socialmente, donde aprovechan su cargo para hacer “política” a favor del PAN, incurriendo en desempeño indebido de funciones y abuso en el ejercicio de los recursos públicos, cuando menos.

El Machucón

En tremendos aprietos meterá el ayuntamiento que viene a la mayoría de los medios de comunicación y los comunicadores, si cumple con las leyes y sus responsabilidades sociales.

Ciudadanizar el gobierno coleto, no es facilitar las decisiones, disposiciones y ceder el poder al “consejo ciudadano” de empresarios, al grupo Na Bolom, a “los observatorios” y a “los Canacos” en general.

Ciudadanizar el gobierno, no es crear el “Instituto de Planeación Municipal” atado al ayuntamiento, orientado a los empresarios y entregado a “Rodri”, el señor de las auditorías en el SAPAM.

Ciudadanizar el gobierno municipal, no es ponerse a “tallerear” hasta el cansancio y después lamentar que se acabó el tiempo y las energías.

Ciudadanizar no es sólo, a lo loco, abrir las puertas, escuchar lamentos, “solidarizarse” y levantar minutas.

Un buen principio y guía para iniciar en serio un fuerte proceso de ciudadanización del gobierno municipal, sería cumplir cabal y puntualmente con todo lo que establece el Título VII de la ley Orgánica Municipal, que trata sobre los “Consejos de Participación y Colaboración Vecinal”, en las áreas urbanas y rurales de los municipios.

Con que el nuevo ayuntamiento lograra establecer y activar a auténticos consejos de participación y colaboración en la ciudad y el campo, estaría sentando sólidas bases y suficientes elementos para promover y atraer desarrollo social, ahora sí, orientado a los más necesitados y no como siempre, sólo a los empresarios, sus socios y a quienes viven de la simulación o complicidad.

Ah, y hay que ser cuidadosos si se pretende, en verdad, eliminar el diezmo, no se vaya a convertir en 15 o 18 %. Ya “Carlitos” el síndico municipal, entiende bastante de esto, no vaya a intentar ser útil para ambos lados.

EL PELLIZCO:


Seguro, si el “consejo ciudadano” de empresarios, “los Canacos”, “los observatorios”, el grupo Na Bolom y “las meras ricas capítulo San Cristóbal”, leen con detenimiento y entienden las dimensiones de los verdaderos “Consejos”, según la ley, se van a espantar y olvidarán para siempre eso de una auténtica ciudadanización del quehacer municipal.

La ciudadanización que conciben, practican y ofrecen todos ellos, es por encimita, de a mentiritas y con el único objetivo de aprovecharse de los recursos públicos, en todas sus formas, fingiendo que es el pueblo quien decide, aprovecha y disfruta.

14 de julio de 2010

Reflexiones y Precisiones

A los medios de comunicación, en su obligación irrenunciable de informar y formar ciudadanos responsables, entre otras funciones, les toca estar al pendiente de todo lo que sucede dentro y alrededor de los gobiernos. A los medios, les corresponde mantener verazmente informados a los ciudadanos, sobre las disposiciones, acciones y resultados de las autoridades, y al mismo tiempo, deben hacer llegar a los gobiernos las diversas opiniones de la sociedad, sin manipulaciones que conduzcan a sólo expresiones bellas, dulzonas y cargadas de calificativos que en nada corresponden a la realidad.

En lo inmediato, a mediano y largo plazos, es tremendo el daño que los medios de comunicación pueden ocasionar a la sociedad y a los gobiernos, si éstos no se aplican con honestidad. Un gobierno permanentemente “aplaudido y festejado” por sus aparentes buenos hechos, terminará creyéndose las “cortesías” por encargo, mareado con su propio incienso, confundido por su mismo ruido y con los pies fuera de la realidad que debe atender y mejorar con entrega y precisión, en beneficio de la sociedad. En el país y Chiapas particularmente, el grueso de las opiniones hacia los gobiernos de los tres niveles no son gratis, y en demasía son frecuentes las que se emiten con la factura adjunta; en blanco, para que sean los otros quienes le pongan precio.


En Chiapas, es inconcebible que algún día el “sistema de radio, televisión y cinematografía” de la entidad, aporte señalamientos autocríticos sobre el desempeño del gobierno en el campo de la economía, la política o la situación social en general que se vive y padece: nunca se ha escuchado que el “sistema de radio y televisión” chiapaneco, se refiera a las acciones de gobierno para algo más que la autocomplacencia, que al final termina dañando a todos, donde magnifican apariencias producto de caras aplicaciones “cosmetológicas”, o de pronunciamientos, resultado de inducciones o convenios mañosamente orquestados. Todo se politiza y se manosea lo que asome.

El medio de comunicación oficial del gobierno de Chiapas, “sirve” bastante menos que para nada útil, socialmente: sobredimensiona todo quehacer gubernamental, miente, e intenta a fuerzas “sembrarlo” en las cabezas de los chiapanecos, por un lado, y por el otro, no define y opera los instrumentos profesionales de comunicación, que garanticen la permanente obtención de la opinión cruda y sin compromisos de todos los ciudadanos; del gran universo que no son empleados de gobierno, que no reciben “70 y más”, “amanecer”, “piso firme” o cualquier otra herramienta de “enganche”, que si se les mide con profesionalismo, sus niveles de impacto social son menos que risibles y generan lastimosos niveles de “adicción y dependencia” que empeoran más y no resuelven gran cosa. “Políticas públicas”, les llaman ellos, que no se ocupan de desarrollar capacidades y riquezas para que los ciudadanos aprendan a valerse por sí mismos, con dignidad, que sean menos atractivos y vulnerables ante quienes les falta nada y quieren más.

Los medios de comunicación que en Chiapas hacen algo por cumplir su función social, la de convertirse en un “puente” que debe tener dos vías: una que lleve confiables elementos de conocimiento al ciudadano y otra que conduzca las opiniones y propuestas de los gobernados a los gobernantes: con franqueza, frescura y credibilidad, aunque temporalmente les moleste o lastime, estos medios son exageradamente pocos, como escasas son las personas que deciden desempeñar este oficio y compromiso; sin la humillante “caridad” de los gobernantes y con todos los riesgos que implica ejercer esta actividad, con nombre y apellidos, de pie, sosteniendo la mirada y expuestos en todo momento a cualquier exceso de la autoridad que incluye acoso y amenazas que pueden terminar en desaparición, cárcel o muerte, donde están expuestos el comunicador y cualquier familiar cercano a él, de éstos hay muy pocos.

Ahora que ya existen nuevas autoridades locales electas para el municipio de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, tienen que aprender a observar y comprender que se encontrarán con opiniones en los medios que les mueve sólo el interés por el bien común, la intención de acercar críticas acompañadas de propuestas, “provocarlos” con señalamientos ácidos que llevan acompañamiento implícito, “desafiarlos” para obligarlos a reflexionar y razonar con responsabilidad, y aplicarles “marcaje personal” gratuito, desde ahora hasta el final, que no lo “desmarcarán ” el dinero, las “invitaciones”, las insinuaciones de tratos preferentes, los “acercamientos” sugerentes y los “puentes” ocasionales.

Por el bien de todos, el “surtidito” ayuntamiento que viene, tiene que aprender a observar, asimilar y abordar de manera diferente. Para iniciar, basta con que se ajusten a las leyes, a su función social y a todo aquello que “protesten” cumplir y hacer cumplir. Las opiniones sin factura anexa, pretenden coadyuvar no entorpecer; construir no destruir; acercar no divorciar y mantenerlos despiertos, no adormecidos.

El Machucón

Con seguridad, en el Ayuntamiento por venir están tan limitados que, sus preocupaciones primordiales han de ser, cómo organizarán la próxima feria de “la primavera y de la paz”; determinar si “Polito” Morales, el hermano del síndico, continuará como uno de los principales beneficiados con las ferias; qué artistas contratarán; quién coordinará las festividades y cosechará las ganancias; dónde se desarrollará la “comida del recuerdo”; quién podría ser la reina; y cómo organizar los “carros alegóricos”.

Se observa tanta ignorancia en las futuras autoridades que, seguramente, la mayoría de ellos han de pensar que un Ayuntamiento sólo tiene como responsabilidad presidir homenajes, ferias, condecoraciones y recibimientos al gobernador Sabines.

Bueno, no faltan quienes ya piensan cómo incrustarán en la nómina al familiar desempleado, y de qué manera tendrán cerca a quien les “alegre” la vida.

Otros como los “Carlitos”, seguro, ya tejen los futuros negocios y vislumbran empresas para habilitar las “jugadas de pared”; con los recursos de la obra pública, los fraccionamientos o las adquisiciones y arrendamientos que son posibles mediante el ejercicio prostituido del poder.

EL PELLIZCO:
En esto de las preocupaciones del próximo Ayuntamiento “jodeleño”, indudablemente, habrá quiénes sólo les atormenta la urgencia por definir, cómo irán vestidos para la toma de posesión, si de color oscuro o claro; si irá papi, mami o ambos; y qué dieta adoptarán para estar en forma, que destaque lo atractivo y minimice los defectos, aunque sea en apariencia y de momento.

Ah, y no faltan los atormentados por las deudas contraídas, la premura por saldarlas y la urgencia por acumular bastante para la campaña que se avecina.

7 de julio de 2010

Reflexiones y Precisiones,

Concluyeron las campañas políticas, llegó y transcurrió el 4 de julio y ahora, “haiga sido como haiga sido”, ya hay resultados: en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, tendremos un Ayuntamiento de chile, dulce y manteca, donde se juntarán, como sucedió con el anterior y el actual; citadinos y “rurales”, agua y aceite, güeritos y negritos, tibios y acelerados, moderados y abusivos, discretos y cínicos e improvisados y ocurrentes, pero, algo los identificará notoriamente: la ignorancia casi absoluta hacia el qué hacer, responsablemente, como gobierno municipal; cómo cumplir con “el cambio” de fondo no de forma que ofertaron; cómo darle rumbo y movimiento a un buen gobierno; cómo desarrollar una administración pública transparente y honrada; qué hacer, acertadamente, en tan poco tiempo; y con qué y de qué manera, resolver las necesidades urgentes y cumplir lo que ofrecieron durante la campaña política.

Los anteriores, son algunos de los grandes retos, y casi nadie del próximo gobierno municipal tiene la formación y suficiente experiencia, como para inspirar la confianza de que sabrán desempeñarse como buenas autoridades, al contrario, a no pocos de ellos se les conoce “debilidades” preocupantes que no tardarán en aparecer, actitudes de soberbia que terminarán en ceguera, visibles actitudes que conducirán a despotismo generalizado y bastantes rasgos personales que pueden llevar a un próximo gobierno municipal, que se le identifique como corrupto, improvisado y de simulaciones, donde, otra vez el saqueo puede ser el motor, el engaño su color, los atropellos su sello, las despreocupaciones su firma y las ocurrencias su brújula.

Se puede afirmar, categóricamente, que el 99% de ellos no saben lo que ganaron y desconocen en la que se metieron. Seguro, ignoran todo sobre las ocupaciones sustantivas de un Ayuntamiento, la función social de un gobierno municipal y todos, ahora, no tienen ni idea de cómo promover y provocar desarrollo municipal, ese que lo más pronto posible debe traducirse en el bienestar social municipal, que se viene exigiendo de muchas formas, todos los días, los años y los trienios, y que hasta hoy, nadie le atina en la dirección correcta y menos, en la magnitud que se necesita. Hasta ahora, casi todo ha sido de puros resultados bofos, cortos en su horizonte, extraviados en su camino e intrascendentes por sus impactos.

No es lo mismo hacer campaña, que hacer gobierno: en la campaña, a veces, basta con saber jalar aire, tragar saliva e hilar promesas; sin embargo, para construir un buen gobierno se necesitan de esfuerzos distintos, con inspiraciones, aspiraciones y orientaciones diametralmente diferentes, con las cuales se garantice obtener buenos, visibles y prontos resultados: atender los rezagos, resolver el presente y prever, comprometidamente, el futuro. Por supuesto, para todo esto se necesita capacidad, compromiso, voluntad, mística de servicio y unas dosis suficientes de responsabilidad social, todas ellas críticamente escasas en estos tiempos, y por lo que se ve y se conoce, serán pobres en el próximo Ayuntamiento “jodeleño”.

Un buen gobierno es el que aprende a estimular y a comprometer la participación ciudadana responsable, el que incorpora decididamente al ciudadano, en todas las acciones de gobierno; un buen gobierno es el que escucha y se deja conducir por sus gobernados; el que no miente; el que encara las dificultades; el que no se esconde del ciudadano; el que lo comprende, le facilita, lo conduce y resuelven juntos.

Un buen gobierno, es el que aprende a buscar y desarrollar las capacidades que le permitan armonizar y acercar el gobierno a la sociedad, y ponerse a su servicio; no es aquel que medio se dedica a tapar hoyos en las calles, cambia focos del alumbrado, medio abastece de agua entubada, recoge la basura, organiza ferias, arma actos “culturales” y levanta borrachos.

Los malos gobiernos son los que se esmeran en “trabajar” divorciados de la sociedad, a espaldas de ella, aprovechándose de sus recursos, contrario a sus intereses, alejado de sus padecimientos, siempre engañando, traficando con todo y de todo, constantemente saqueando, y en todo momento, muy preocupados por los de arriba y olvidados de los de abajo; de aquellos que llenaron con ofrecimientos, en quienes despertaron inalcanzables expectativas y a quienes ofrecieron “entrega total y amor eterno”, como dicen algunas canciones.

Seguro, las próximas autoridades coletas, sobre sus obligaciones ignoran casi todo, y el resto, jamás se dará el tiempo para aprenderlas, más, cuando cobren su primer quincena, y much@s de ell@s tengan en su mano lo que nunca habían tenido y que ahora tendrán por 20 meses; no pocos se alocarán, otros, no sabrán qué hacer, unos más adoptarán vicios y costumbres caras, y sin duda, la mayoría perderá piso y se les despertará el apetito por los pesos.

El Ayuntamiento “jodeleño” que se estrenará el primero de enero del 2011, si los ciudadanos no participamos con nuestras críticas, propuestas y compromisos, desde donde se pueda, podría resultar el peor de los últimos 15 años: no tendrán a su alcance los suficientes recursos económicos que les permita atender las demandas y sus ofrecimientos; los rezagos, necesidades actuales y las futuras, son de consideración; tienen muy poco tiempo; estarán siempre influenciados o inmersos en el proceso electoral del 2012, con los “calores sociales” que traerá implícito; y por si faltara, en grados preocupantes, en el Ayuntamiento que viene no escasean los perfiles contaminados y en extrema “pobreza”, en todos los sentidos y de todas las tallas.

P.D. Cuando se habla del próximo Ayuntamiento “jodeleño”, se considera que además del “equipo” ganador, estarán otros que formaron parte de las planillas contrincantes, que seguro, difícilmente facilitarán el buen entendimiento y desempeño.

El Machucón

Ni duda cabe, Magdalena Trujillo Cifuentes tiene visión y sensibilidad para los negocios oportunos:

La “mequita” de estética, ya le “trabajó” al PRI, PT y PRD; ahora, en “jugada habilidosa” decidió brincar y subirse a un ladrillo, para que la vean bien, le calculen y le ofrezcan.

Sabe que tiene margen de maniobra; que puede regresar al PRI o ir, en otro momento, con el PANAL, el Convergencia, el PAN, Nueva Alianza, el PSD o regresar al PT o PRD, así, hasta el final de su existencia. Total, para eso tiene “ideología, principios y congruencia”, para ello es “valiente y de valores”, dice ella.

EL PELLIZCO:

Beatriz Paredes Rangel, líder nacional del PRI, con su visita a San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, a quién apoya más: a Cesar A. Santiago, Sergio Lobato, Mariano Díaz, Karla Lugo, o a Víctor Ramos. En qué orden pueden resultar beneficiados o en grave riesgo.

¿No será que los beneficios también podrían llegar hasta Oscar Domínguez “El Puma”; que haya significado su presentación en sociedad, para que la próxima Presidencia Municipal de 3 años, se la dispute con “Karlita”?.