Piensa, Prensa y Pega.

19 de diciembre de 2012

“LA MISMA”




Hace 12 años, con el ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía, la canción sexenal fue “Uno con todos”. Al concluir ese gobierno, quedó claro que había sido “Uno contra todos”. Ya después, se convirtió en “Todos contra uno” y lo llevaron a la cárcel.

En los últimos 6 años, con el ex gobernador Juan Sabines Guerrero, la canción del sexenio fue “Son hechos, no palabras” y ya es evidente que fueron “Malos hechos y puras palabras”. Ahora hay que esperar si deciden también llevarlo a un reclusorio o si se conforman con encarcelar solamente a alguno de sus parientes o amigos.

Hoy, con el gobernador Manuel Velasco Coello, llegó la melodía Chiapas nos une” y ya podría uno preguntarse y preguntar muy seriamente: ¿las miserias de miles y las riquezas de muy pocos, unen?, ¿el abandono de miles y la sobreprotección a unos cuantos, unen?, ¿de dónde une?, ¿en qué une?, ¿cómo une? Hablar de unidad en un estado donde prevalecen las desigualdades sociales, suena a burla o a chascarrillo. Quizá la política entienda de sarcasmos, pero la realidad de la gente no.

Reflexiones y Precisiones



Si se intenta, objetiva y críticamente, opinar sobre los primeros días de gestión del gobernador Manuel Velasco Coello, a partir de lo que es posible conocer públicamente, las señales son nada alentadoras para la sociedad chiapaneca. Si revisamos los hechos más notorios sucedidos del 8 de diciembre al día de hoy, pareciera que “El Güero” y su grupo de trabajo desaprovecharon el tiempo transcurrido entre el día de la elección y el de la toma de protesta. No se les ocurrió utilizar los cinco meses, para ponerse en condiciones óptimas para asumir, pronta y plenamente, la gubernatura del estado. El gobernador está dando la impresión de que tenía equipo humano sólo para hacer campaña política, pero que no cuenta con equipo de trabajo para asumir, responsablemente, las tareas de gobierno y administración pública. Así parece y, para demostrarlo, el día de hoy se hará un repaso general sobre lo que más ha llamado la atención y de lo que nada se ha dicho.

TODO INICIÓ EL 8 DE DICIEMBRE. La toma de posesión de Manuel Velasco Coello como Gobernador Constitucional del Estado de Chiapas, se pareció a una Convención Nacional de Gobernadores a la que fueron invitados no pocos de los más importantes empresarios y políticos de este país. Los hombres de empresa que asistieron no fueron de los ricos que se les califica así por sus millones en pesos, sino en dólares; y los políticos que el 8 de diciembre acompañaron a “El Güero” Velasco, no eran  políticos “de medio pelo  de alguna importante entidad del país, no, estuvieron los que hoy mandan en la República Mexicana -sólo faltó Carlos Salinas de Gortari, aunque llegaron sus representantes-, de todas las edades y de todos los institutos políticos. Al parecer, había una firme pretensión para que los asistentes al acto vieran en Manuel Velasco Coello, a alguien con las capacidades y relaciones políticas y económicas, locales y nacionales, como para, con una pulidita, convertirlo en uno de los más fuertes candidatos a la próxima presidencia de la República Mexicana. Así pareció.

Hasta aquí, todo dio la impresión de salir muy bien y puede afirmarse que, ni lo más mínimo fue casual, todo fue debidamente imaginado, planeado y ejecutado, sin embargo, falló lo más importante para Manuel Velasco Coello. Sus operadores políticos, sus cabilderos de cabecera, no fueron capaces de hacer que viniera el más deseado por ellos, para redondear este acto protocolario, de una nueva etapa política para “El Güero”: no pudieron traer al presidente Enrique Peña Nieto. Inclusive, no solamente fallaron en no poder traerlo, sino que además, ni siquiera pudieron traer a uno de los más cercanos al presidente de México, cuando menos, Miguel Ángel Osorio Chong, Jesús Murillo Karam o Luis Videgaray Caso.

En la toma de posesión de  El Güero” Velasco, tuvieron que conformarse con la titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, la que hace todavía no mucho tiempo se vio involucrada en presuntos -no pequeños- actos de corrupción, cuando fue jefa de Gobierno del Distrito Federal; hechos que se conocieron y fueron trasmitidos por las principales televisoras del país, en horario estelar, donde se daba cuenta de algo muy parecido a una telenovela político-amorosa y de sucios negocios,  que bien se pudo haber llamado, “Amor y Dinero”, “Rosario Ahumada” o “Rosario se Ahumó”.

Con Robles Berlanga, tuvieron que conformarse “El Güero”, “sus amigos y grandes amigos” y quienes le planearon y ejecutaron  su muy probable primer “gran acto de inicio” político,  hacia la próxima primera magistratura del país. Rosario Robles, la que exhibieron públicamente como corrupta y quien por momentos olió a reclusorio, fue quien trajo la representación personal de Enrique Peña Nieto para la toma de posesión de Manuel Velasco Coello, a ella tuvieron que agradecerle su presencia y por su conducto, le enviaron agradecimientos, reconocimientos, ofrecimientos y saludos al presidente Enrique Peña Nieto. Aun con todo,  hay quienes afirman que fue la representante que Chiapas necesita, que promete y que fue la indicada.

Manuel Velasco Coello pareciera que no tiene asesores, sino, en su mayoría, sólo bufones y aduladores. Al fracaso de no poder traer a Enrique Peña Nieto o alguien de sus más cercanos, a la toma de posesión del gobernador Velasco Coello, se le deben agregar otros descuidos mayores y evidentes ineptitudes. ¿Quién le elaboró el documento al que dio lectura ante importantes invitados nacionales y locales?, ¿quién decidió que de los 47 minutos que duró el discurso, 25 los dedicara a presentar y presumir a sus “amigos y grandes amigos”,  con excesiva melosidad, y 22 minutos a un mensaje político muy alejado de lo sustantivo y bastante cerca de lo superficial, de lo hueco, de lo de costumbre, de todo aquello que, constantemente, machacó ya en la contienda electoral? Sus asesores no imaginaron y menos entendieron, que no se trataba de un acto de campaña política más,  sino de su primer discurso como Gobernador Constitucional del Estado de Chiapas. Desaprovecharon la gran oportunidad que tuvieron para hacer que “El Güero” se luciera ante sus muy importantes invitados. Lástima tanto esfuerzo político y tanta inversión económica.

Si los estrategas nacionales de Velasco Coello le fallaron a medias, sus asesores personales inmediatos le fallaron del todo. A ninguno de los asesores se le ocurrió pensar que en el primer acto de gobierno de “El Güero”, debería, además de presentar a sus” amigos y grandes amigos”, de manera resumida, transmitir conocimiento a fondo sobre la realidad chiapaneca y sus posibilidades de desarrollo justo,  equilibrado y sustentable. Dejar claro  a los asistentes invitados y a quienes lo veían o escuchaban por los medios de comunicación, que conoce a plenitud la problemática chiapaneca; que comprende y sabe cómo superar las desigualdades e injusticias sociales añejas; que sabe bien de las capacidades estatales; que identifica las limitaciones de todo tipo; que entiende sobre la urgencia de buscar soluciones y no únicamente salidas temporales a las reales amenazas para el desarrollo y la paz social de los chiapanecos; que sabe y comprende sobre el papel corresponsable que deben jugar gobierno y sociedad; y que entiende sobre la extrema urgencia de no suplicarle recursos al gobierno federal, sino que se le exijan de pie y en voz alta, todo lo que a Chiapas le deben. Los asesores del gobernador Manuel Velasco Coello, desaprovecharon el gran acto con “amigos y grandes amigos”, para hacer que él transmitiera conocimientos, confianza, carácter y  certidumbre en el quehacer público que inicia, y que se espera que sea para el buen futuro de todos, no solamente para los politiqueros y empresarios.

Más allá del primer acto de gobierno, preocupa bastante el que también pareciera que los cinco meses entre la elección y la toma de posesión de “El Güero”, fueron totalmente desaprovechados por sus asesores. Por lo que hoy se observa, para nada les sirvió el proceso de entrega-recepción, si verdaderamente lo hubo. Jamás entendieron que habría de utilizar ese tiempo para conocer, reflexionar, analizar, imaginar escenarios, prever respuestas,  organizarse, y darle forma a un serio y profesional equipo de trabajo. Los asesores no hicieron lo suficiente para que Velasco Coello tuviera elementos confiables y oportunos para, en cualquier momento, tomar decisiones administrativas y políticas, las que fueran. Gracias a los asesores, se está dando la impresión de que el ex gobernador Sabines los tuvo cinco meses maniatados, amenazados o entretenidos.  Por sus asesores y amigos, también, eso de que en menos de 48 horas nombró y quitó a dos colaboradores de primer nivel en su gabinete,  hace ver muy mal al gobernador Velasco Coello; y eso de que cumplió 13 días como titular del Poder Ejecutivo y todavía continúa con el Secretario General de Gobierno y el Procurador General de Justicia de Sabines Guerrero, que quién sabe si trabajan para Juan Sabines o Velasco Coello, no lo presenta como un gobernador fuerte, seguro, con pulso y que inicia con todo el apoyo político del centro del país. Se puede decir mucho más sobre los primeros días del gobernador Manuel Velasco Coello y los resultados de sus asesores, pero resultaría inoportuno hacerlo en temporada de fiestas decembrinas. Ya habrá suficiente tiempo y elementos, seguramente. Los que puedan, ¡feliz navidad y próspero año nuevo!

El Machucón


Por lo sucedido en los últimos días de gestión del ex gobernador Juan José Sabines Guerrero, los anteriores miembros del Congreso del Estado de Chiapas, quedaron como sumisos, bandidos y cómplices. Pero lo que es peor, los actuales diputados y diputadas quedaron como cobardes: reclamaron abusos, cuando ya se estaban vistiendo; gritaron, cuando ya habían sido mancillados; se opusieron, cuando ya habían sido ultrajados públicamente; e intentaron aparecer como dignos, cuando aún se les veía sangre en la panza y las rodillas, de cuando se habían arrastrado, de cuando se habían hincado.





EL PELLIZCO:



Manuel Velasco Coello, gobernador de Chiapas, sus peores enemigos bien podrían ser los que ya empezaron a decir, por adelantado, que con Ud. todo será “unidad, honradez, democracia, desarrollo y pluralidad”. Los (as) que ya dicen que llegó el cambio: “que ahora, nada de nepotismo, persecuciones, corrupción, centralismo, autoritarismo y opacidad en el quehacer público”; quienes le expresan todo esto, como si Ud. lo ordenara en estos términos y como si ya tuvieran la autorización de luego enviar la factura.



“Cambian de hombre como de camisa”: ahora en la toma de posesión de Manuel Velasco Coello, los políticos y empresarios que ante Juan Sabines Guerrero se presentaban con camisas que parecían traer tirantes incluidos, ya no se las pusieron.




13 de diciembre de 2012

“GOLPE TRAIDOR”



Hombres y mujeres de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística en el municipio de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, ¿por qué han guardado tanto silencio cómplice ante los atropellos de que está siendo objeto su Consejera Secretaria, María Enedina Domínguez Díaz, por parte de autoridades del municipio?

Hombres y mujeres del Consejo Municipal de la Crónica Sancristobalense,  ¿no les da vergüenza que a más de dos meses de arbitrariedades en contra de su Consejera Secretaria, María Enedina Domínguez Díaz,  ustedes han hecho nada por apoyarla?

Hombres y mujeres del Seminario de Cultura Mexicana, corresponsalía San Cristóbal ¿por qué tanta cobardía y por qué permiten y han abandonado a su suerte a su Consejera Secretaria, María Enedina Domínguez Díaz?

¿Hombres y mujeres?

Reflexiones y Precisiones



En 48 horas más, se cumplirán ocho días de que tomara posesión como gobernador del estado de Chiapas, Manuel Velasco Coello, “El Güero”. Por un lado, terminó la gran borrachera en el ejercicio del poder practicada por Juan José Sabines Guerrero, y por el otro, ahora estamos ante el riesgo verdadero de que se inicie un período prolongado de puras declaraciones espectaculares y celebraciones a destiempo. Vitorear  los anuncios del nuevo gobernador como si ya fueran resultados. El  agujero profundo para enterrar, si bien le va, al ex gobernador Juan José Sabines Guerrero, se empezó  a cavar desde meses antes de que concluyera su gestión. Quienes durante varios años, a Sabines Guerrero, le dijeron que olía bien, ahora le empezaron a decir abiertamente, que emitía olores fétidos; aquellos que por años lo magnificaron y le aplaudieron lo que hacía, lo empezaron a desvestir para dejar a la vista de todos, sus engaños; sus principales aliados políticos, económicos y hasta religiosos, lo abandonaron como si se tratara de un cadáver al que urge sepultarlo. El gobernador Manuel Velasco Coello, por su bien y el de los chiapanecos, está obligado a identificar a todos estos actores cómplices, convenencieros e hipócritas,   y aprender de estos hechos, en extremo,  aleccionadores.

El gobernador Manuel Velasco Coello, para que esté en condiciones de poder “cumplir y hacer cumplir” lo que protestó formalmente desde el primer día de su gobierno, debe contar con el apoyo franco, capaz, desinteresado  y decidido de los chiapanecos. ¡HAY QUE AYUDAR AL “GÜERO”!, y desde este espacio se le ofrece apoyo, como siempre se ha hecho con anteriores gobiernos, sin variar la línea y corriendo los riesgos que sean necesarios: se le hablará con la verdad, aunque le duela, es por su bien; se le hará ver lo que otros le oculten o disfracen; no se le tratará con esos cariños que llevan factura incluida;  nunca se le adulará, porque le puede hacer daño; se le mostrará  la realidad crudamente, sin cocción previa; se le acercarán los hechos, al natural, sin saborizantes o colorantes; no debe esperar a que se le celebre algo, ya otros lo harán excesivamente; aquí, siempre se estará al pendiente de lo que diga, de lo que haga, de su congruencia y de sus resultados. Seremos sus más puntuales críticos. Y lo mejor para el Gobernador, toda esta ayuda le costará nada, será gratuita, como se acostumbra desde  este espacio. INFORMADO.

El gobernador Manuel Velasco Coello está obligado a observar y aprender del pasado inmediato; de Pablo Salazar Mendiguchía y de Juan José Sabines Guerrero. Él conoció y vivió todo de cerca y muy bien: sabe  cómo inició, de qué manera se desempeñó, cómo era tratado, cómo concluyó y hasta dónde fue a parar el ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía. También conoce cómo empezó,  de quiénes se rodeó,  de qué forma trabajó, cómo le gustaba que lo engañaran y engañarse, cómo se le veneraba, quiénes lo alababan y las condiciones en que finalizó y pudiera, todavía, empeorar el futuro personal del ex gobernador Juan José Sabines Guerrero. Es basto y rico el material político y administrativo, decepcionante y repudiable, de los últimos 12 años,  que está a la mano de “El Güero” Velasco; tiene la oportunidad de “aprender en cuero ajeno” y gratis, de no cometer los mismos errores o incurrir en peores, de ser congruente con todo lo que ofreció durante sus 12 años de campaña política para llegar a la gubernatura del estado, y está obligado a cuidar la imagen y el legado de su abuelo, el ex gobernador Manuel Velasco Suárez.

Con los antecedentes políticos y administrativos, públicos, ya conocidos, de Pablo Salazar y Juan Sabines, y con los seis días que lleva como gobernador Manuel Velasco Coello, ya tiene material suficiente para comprender quiénes podrían ser, desde ahora, sus peores enemigos. Los peores enemigos de Velasco Coello son ya aquellos que se le acercan sólo para hacer negocios a la sombra de su gobierno; los peores enemigos de Velasco Coello son quienes ya empezaron a tratarle como si fuera un mesías chiapaneco; los peores enemigos de Velasco Coello son aquellos que ya pensaron o piensan en cómo administrarle su relación con los ciudadanos comunes   y de qué forma hacer  que él se dedique más a los de arriba; los peores enemigos de Velasco Coello bien pueden ser los familiares o amigos incómodos, que malentiendan y utilicen, indebidamente, su nombre;   los peores enemigos de Velasco Coello son aquellos que ya empezaron a trabajarle su ego, a adularle, a hacerle sentir Dios, inmortal, omnipotente y omnipresente.

Los peores enemigos de Velasco Coello bien pueden  ser aquellos y aquellas que ya lo cercan, aíslan y buscan cómo administrarle su tiempo y relaciones, y que terminarán por volverlo ciego, sordo e insensible ante las miserias, abandonos, atropellos, saqueos,  impunidades e injusticias sociales  que en Chiapas se dan y reproducen desde hace décadas, como la mala hierba; los peores enemigos de Velasco Coello ya andan cerca de él, son aquellos y aquellas que en otros tiempos rodearon, alabaron y se aprovecharon de Pablo Salazar y Juan Sabines, los (as) que utilizaron a uno o ambos, esos y esas que hoy, desesperadamente, buscan cómo untársele al nuevo gobernador, cómo engancharlo y cómo cosecharlo; los peores enemigos de Velasco Coello son todos (as) aquellos (as) que ya lo sorprendieron con falsas habilidades y conocimientos sobre la realidad chiapaneca, y que le han ofrecido “el mejor de sus esfuerzos” para desarrollar, tranquilizar y construir un Chiapas próspero para todos, con “una paz fundada en la igualdad, justicia, democracia, desarrollo y verdadera solidaridad social”, pero que le mienten; los peores enemigos de Velasco Coello ya andan con él: son los que ya le manipulan la vista, los oídos, la boca, el tacto, sus sentimientos y luego irán por el poder para aprovecharse de lo político y lo económico, hasta donde puedan y como están acostumbrados.

Manuel Velasco Coello no la tiene nada sencillo y la situación chiapaneca podría complicársele aún más. Como gobernador, ya está sometido a serias dificultades; ya padece  aprietos políticos, económicos y sociales: el legado de sus antecesores constituye muy bien una desgracia estatal, por donde se le vea. La desconfianza, decepciones e incredulidad hacia las instituciones del gobierno, es mayúscula; capacidad económica para dar respuesta oportuna a sus ofrecimientos, por ahora, no la tiene; las presiones severas para que comparta el poder con los poderes fácticos, las iniciaron desde antes de que tomara posesión del cargo y se volverán una constante; los actores políticos y económicos de Chiapas y del país, en todo momento, tratarán de aprovecharse de su edad, de su inexperiencia en administración pública y de la bisoñez o debilidades de quienes le acompañen en la responsabilidad de practicar una administración pública honesta y  HACER BUEN GOBIERNO. El gobernador no la tiene fácil y sus peores enemigos, unos  ya se mueven con él, y otros ya lo acosan.