Piensa, Prensa y Pega.

16 de diciembre de 2009

Reflexiones y Precisiones

En México y Chiapas, desde siempre, tres cuestiones ocupan ruidosamente los días del mes de diciembre: las celebraciones en torno a la virgen de Guadalupe; las festividades relacionadas con los acontecimientos en “Belén” y las ceremonias que se disponen y decoran en todos los municipios, donde “se informa” que las autoridades municipales están cumpliendo lo que ofrecieron, que “son dignos de confianza” y casi se insinúa que se les debe reconocer y aplaudir.

En Chiapas, si se tiene el cuidado de escuchar, leer, investigar y analizar, sobre lo que se dice en los “informes municipales”, y luego se les relaciona con los hechos visibles y las opiniones desinteresadas en los municipios, se concluye fácilmente que todo es teatro, circo y maroma, donde sin ningún pudor y deliberadamente, se miente, se insiste en prometer, se disfraza, se esconde, se entretiene y se abusa de la paciencia y tolerancia de los ciudadanos, pidiéndoles todavía más tiempo y mayor comprensión.

A todos los “informes municipales”, el gobernador envía a su “representante personal” y los ayuntamientos, particularmente los alcaldes, no desaprovechan esta oportunidad, para en presencia de ellos, adornarse, mostrarse simpáticos, honestos, cumplidores, queridos por “sus pueblos” y simular facilidad para el derroche de carisma. Mantas y pancartas con la misma letra cuelgan en los recintos, los acarreos “voluntarios” son notorios, nunca faltan los aplausos estudiados y pocas veces no se presentan los gritos y porras, previamente ordenados y ensayados hasta en sus tiempos, tonos e intensidad. Todo para consumo externo e interno, pretendiendo ocultar ineptitudes, disimular ignorancias, encubrir corrupciones, minimizar abusos y lograr impunidades.

Los ayuntamientos y principalmente los presidentes municipales, invariablemente, se esfuerzan por utilizar al máximo la presencia de los “representantes personales” del gobernador, para mandar a decirle, “sinceramente”, que le agradecen todo su apoyo; que “le reconocen” visión y entrega, tacto y valor, firmeza y entereza; que le ven madera de estadista; que pasará a la historia; que es referente en el planeta; que es incansable en su esfuerzo por Chiapas; y, casi le mandan a decir que por favor duerma y coma, no se vaya a morir y Chiapas pierda al mejor gobernador en turno. Seguro, todos los presidentes de Chiapas, en estos términos se referirán en sus “informes”, de esta manera tratarán a Juan José Sabines Guerrero, nada nuevo, otros también así lo han hecho en su tiempo.

Entonces pues, uno de los entretenimientos mayores en el mes de diciembre, todos los años, son los “elegantes” y caros “informes municipales”, que resultan cualquier cosa no seria, menos verdaderos informes; comparecencias responsables, actos ejemplares de transparencia y ni soñarlo siquiera, un encuentro entre gobierno y sociedad: un ejercicio único y sincero donde el gobernante cumpla cabalmente su responsabilidad de informar, y los gobernados tengan la oportunidad de exponer sus opiniones, de manifestar sus dudas, confiar sus temores, y por qué no, públicamente reconocerlo o reprenderlo, según las acciones emprendidas y los resultados obtenidos.

Ni pensarlo que el Ayuntamiento de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, dará cuenta de lo que ofreció y no ha cumplido, ni imaginarse que sabrá entender y explicar la compleja y difícil realidad municipal, y bastante lejanos estarán de aprender a reconocer errores, aceptar abusos, admitir irresponsabilidades, pedir disculpas y saber ofrecer, con humildad, que corregirán todos los aspectos desastrosos y deplorables, que cotidianamente ofrecen en sus actos públicos y privados de administración y gobierno municipal.

Por supuesto, en este escenario habrá nulo espacio para que los ciudadanos comunes manifiesten lo que piensan, dudan, sugieren o les urge exigir.

Tristemente, los “informes municipales” no son lo que debieran ser, se reducen sólo a pobres actos de politiquería en el que abundan las simulaciones, el discurso fácil, las “caricias baratas”, la retórica con desgastados conceptos en desuso, el derroche de halagos huecos y el ofrecimiento e imploraciones desesperadas por un amor sin condiciones o aunque sea cariños politizados, donde amor y cariño se sirven sobre billetes, se adornan con traiciones y se amarran con humillaciones. Escatiman nada, para ellos, la dignidad tiene tarifas y los principios, precio.

El Machucón

Si leemos despacio y reflexivamente, lo escrito por el arzobispo Rogelio Cabrera y el obispo Felipe Arizmendi, entre el 10 de noviembre y el 3 de diciembre, y lo asociamos, levemente, a nuestra realidad chiapaneca, particularmente a las convulsiones y desencuentros de esos días, es obvio que ellos no pretenden llamar la atención del más allá, sino sensibilizar y alertar a los de acá.

Por momentos pareciera que le están leyendo la mano al gobernador, que regañan a Nemesio, que reprenden a Perkins, que quisieran transmitir fuerzas y coraje a Don Noé, que increpan a Maggdy, el de la ONU e inclusive, que exhortan fuertemente a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, completos.

En estas circunstancias, urge más aprender a leer y escribir, no ignorar al Arzobispo y al Obispo, y limpiarse la mugre de los ojos y oídos.

EL PELLISCO:

En San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el gobernador Juan Sabines firma minuta con la OCEZ; en San Cristóbal, Sabines entrega ambulancia; en San Cristóbal, Sabines inaugura andador; en San Cristóbal, el Secretario General de Gobierno de Sabines, se deshace en elogios hacia el presidente municipal, Mariano Díaz Ochoa, todo, casi en cuestión de horas… no es cariño, menos es amor, es sólo que, ya encontraron cómo ponerse de acuerdo en sus intereses. Igual sucedió entre Pablo Salazar y Sergio Lobato, dos años lo mantuvo hincado, y luego le dio a probar.

9 de diciembre de 2009

Reflexiones y Precisiones

Analizando en sentido estricto y a profundidad la palabra analfabeta, auxiliados con la definición que establece el diccionario de la Real Academia de la lengua española, se puede concluir que la tasa de analfabetismo contabilizada por el INEGI en México, se encuentra bastante alejada de la verdad.

A los que literalmente, no saben leer y menos escribir, que hoy configuran el universo de analfabetas en el país, habría que agregarle a los millones de egresados con licenciatura y a todos los postgraduados en México y el extranjero, que leen pero no entienden, que escriben pero no son capaces de reflejar la realidad a que se refieren; leen una oración y la interpretan al revés, describen hechos y circunstancias diferentes a las que observan; todo lo acomodan a sus intereses, conveniencias o principios, todos estos, en cierto sentido, también resultan analfabetas.

Mucho bien haría socialmente, que con empeño nos esforzáramos por aprender a leer y escribir, con una sobredosis de responsabilidad social, que asegure el perfecto entendimiento a lo que leemos, que garantice que lo escrito refleje celosamente lo que se observa, y principalmente, que lo leído, observado, escrito o pensado, se practique y comprometa. Parece fácil, sin embargo en nuestros tiempos, viene resultando demasiado difícil y ocasionando abundantes problemas, donde los ciudadanos, las mayorías, los vienen acostumbrando sólo a escuchar promesas y cosechar problemas.

Es cuestión bastante generalizada, leer como si todo se tratara de revistas de “Lágrimas y Risas”, “Kalimán”, “Vanidades”, o “Memín Pingüin”, con irresponsable ligereza y superficialidad. Es harto común que con estos patrones conductuales también se observe y escriba, con resultados finales donde en lugar de ayudar a la colectividad, terminan enredando las relaciones sociales, confundiendo, dificultando el camino, facilitando el abuso y explotación de una minoría sobre la mayoría y entorpeciendo el desarrollo favorable y pleno de la sociedad en su conjunto.

“Reflexiones y Precisiones”, en esta urgencia y necesidad por aprender a leer y escribir, en sentido amplio, encontró y ofrece material para ejercitarse, algo de lo más reciente escrito por el arzobispo Rogelio Cabrera López y el obispo Felipe Arizmendi Esquivel, que bien pueden servir para un buen entrenamiento, siempre y cuando la lectura se detenga en la línea y entrelínea de los textos, se contextualice, de los pies a la cabeza, se lea al derecho y al revés, mucho se les puede aprender: surgen las evidencias, asoman las incapacidades, brotan las contradicciones, aparecen las lecciones y se evidencian las incongruencias.

Dice Don Rogelio Cabrera en “Eco Interior” del 10 de noviembre: “La integridad es una virtud que va de la mano con la honestidad, con la pureza, con la humildad y con la verdad…”, “quien presume lo que no es, pronto queda al descubierto…”, “lo contrario al hombre íntegro, es el hombre ambiguo, al cual la biblia le define como el hombre de doble ánimo, quien es inconstante en todos sus caminos…”, “integridad significa congruencia entre pensamiento, emociones y voluntad. Describe a alguien sin hipocresía ni doblez…”, “hoy, ante tanta desilusión que vivimos en varios aspectos de la vida y de nuestros roles en la sociedad, reclamamos integridad de nuestros gobernantes, de nuestros ministros de culto, de nuestros catedráticos y de los papás”. Ni modos que no se entienda, no le habla a los muertos, si no a los vivos, “los más vivos”.

El 17 de noviembre, en “Aceptación de nuestro final”, el arzobispo Cabrera López expone: “Ante el fin hay una actitud, que se convierte en virtud: el discernimiento. El saber discernir, nos permite actuar movidos por la conciencia y la reflexión. Es la facultad de escoger, de distinguir, de valorar o evaluar…”, “antes de tomar decisiones se debe discernir, pero para ello es necesario tener claridad del sentido de la vida, estar anímicamente estable y querer pensar…”, “hay también elementos que debilitan nuestro discernimiento, tales como: el excesivo y desordenado apego tanto a las cosas materiales como a la influencia de las personas; esta situación nubla un buen juicio. Los sentimientos, emociones y la falta de estabilidad de ánimo hacen voluble la opción”.

El arzobispo dice: “El poder escoger, saber distinguir y seleccionar es una gran riqueza personal que nos ayuda a mantenernos en pie a pesar de los infortunios y dolores. Una buena decisión nos prepara para un posible fracaso, porque nos dará fuerza para volver a empezar. Dice el apóstol Pablo: por todos lados nos aprietan, pero no nos aplastan; andamos con preocupaciones, pero no desesperados… derribados pero no aniquilados”. (2Cor.4,8-9).

En “Eco Interior” del 3 de diciembre, el arzobispo Cabrera López expresa: “Estar vigilante significa estar alerta o despierto. Una persona que permanece alerta puede superar cualquier problema y responder activamente a lo que el futuro le depare. La vigilancia se convierte en un valor y hasta en una virtud, porque contrarresta, específicamente, a la indiferencia”… “el estar despreocupado o ser indiferente nos pone en peligro de fracasar o equivocarnos…”; “todos debemos vigilarnos en nuestro propio comportamiento porque estamos expuestos a gravísimos errores…”, “vale la pena desarrollar en cada uno de nosotros esta actitud de estar “preocupados” por el otro, no se trata de una preocupación enfermiza, sino aquella que compromete a vigilar y estar atento”.

Expresa Don Rogelio: “cada uno en su ambiente puede hacerlo. Pienso en las autoridades que deben cuidar que las leyes y el orden social ayuden en el desarrollo de los pueblos, no sólo materialmente sino de modo integral…”; “para fortalecer esta virtud de la vigilancia, se requiere siempre de la conciencia y reflexión, de una constante mirada y escucha de los signos que se van presentando. Pero también es necesario hacer caso del consejo y de las advertencias de muchos que realmente miran por el bien y el desarrollo integral”.

El 3 de diciembre en “Parroquias más misioneras” el obispo Felipe Arizmendi asienta: “se procura responder a las necesidades del pueblo en sus demandas sociales de justicia y el cuidado de la ecología…”; “una pastoral profética que haga realidad una evangelización integral, que toque a la persona y a las necesidades sociales, con una búsqueda creativa de estructuras, métodos y dinámicas…”; “ tener un compromiso con el reino de Dios en la promoción humana integral: justicia social, caridad cristiana, dignidad humana, opción preferencial por los pobres y excluidos, atención a los rostros sufrientes, globalización de la solidaridad”. Más claro, ni el día.

El Machucón

Hay que aprender la lección de que el 30 de octubre, con la ocupación pacífica de las oficinas de la ONU en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, se dio un golpe macizo y maestro, y el conflicto OCEZ-Iglesia-Sabines, alcanzó uno de sus momentos más tensos, donde se apostó casi todo, y que fue a partir del 16 de noviembre cuando, aparentemente, todo empezó a aflojar.

Si de las fechas, movimientos y “mensajes”, pudieran resultar señales importantes, para analizar y avanzar con algo de facilidad, conviene revisar y reflexionar sobre las siguientes:

El 16 de noviembre, acompañado del arzobispo Rogelio Cabrera López, el gobernador colocó la última teja al templo católico en Nuevo Juan del Grijalva.

El 17, con motivo a la celebración de los 31 años de ordenación sacerdotal del arzobispo, el gobernador le dijo que es “un hombre que consolida la paz”.

El 19, el gobernador mandó a mostrar buenos avances en la primera etapa del político “Cristo de Copoya”.

El 20, aparecieron el gobernador y el obispo Felipe Arizmendi, en notoria fotografía actuada, enviando forzados signos de entendimiento.

El 23, utilizando la misma fotografía del 20, el gobierno difundió que el obispo Arizmendi dijo: “le doy gracias a dios que me dio la oportunidad de tener un diálogo con el señor gobernador... veo en él buena disposición para que las cosas mejoren”.

El mismo 23, el obispo Arizmendi asomó urgiendo y metiendo cuña, al decir que esperaba que cambiara la situación de hostigamiento y acoso que se venía padeciendo.

El 24, apareció la noticia de que “Chema” y sus compañeros encarcelados habían sido liberados.

El 28, se dio a conocer que el 26 por la noche, se había firmado una minuta entre el gobierno del estado y la OCEZ, por supuesto, con mediación y bendición religiosa.

Sin embargo, hasta hoy continúa la manifestación de la OCEZ en la Plaza Catedral y anunció que permanecerá en la banqueta de las oficinas de la ONU en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, ¿qué sigue trabado?, ¿no querrá alguien madrugar de día?, ¿se buscan soluciones o sólo administrar el conflicto, ¿estará consciente el gobierno que apenas apagó las llamas, y que la leña sigue ardiendo?.

Si el gobernador Sabines ha entendido las lecciones recientes, muy pronto habrá cambios en el gabinete, que a lo mejor sirven nada y sólo terminan abonando posibles movimientos mayores, ya se verá.

Ah, y si el gobernador aspira a un sexenio completo, tiene que replantear y recomponer su relación con la Iglesia; no es saludable moverse siempre de la mano y desperdiciando piropos, como tampoco andar de las greñas y enviando señales obscenas.

3 de diciembre de 2009

Reflexiones y Precisiones

Cumplió tres años el gobierno de Juan José Sabines Guerrero, y puede decirse que dos cuestiones son las que más han destacado: las fiestas permanentes para auto festejarse y difundir que va bien y que sabe cómo hacer buen gobierno, y los escándalos con agravios y muertos donde invariablemente, en los momentos más difíciles y decisivos, ha tenido como interlocutores determinantes a conocidos jerarcas de la Iglesia Católica chiapaneca.

A tres años de iniciada la administración pública de Sabines Guerrero, que en pachangas seguramente ya superó a su papá, ha de tener bien claro que sus momentos más amargos y frustrantes, los ha vivido frente a experimentados y habilidosos personajes de la Iglesia Católica; ninguna les ha ganado y en todas ha terminado exhibido y regañado con la “delicadeza y prudencia” acostumbrada por los hombres de fe.

Hasta hoy y como ejemplos, entre otras cuestiones públicas, en tres episodios han metido en serios aprietos al Gobernador Sabines, obligándolo a sentarse, discernir, comportarse íntegro y “persuadiéndolo”, con apenas la necesaria sutileza y algunas parábolas, a saber: cuando los enfrentamientos y ejecuciones en Chincultik; durante el intento de reelección de diputados y ayuntamientos, vía reforma electoral, propiciada por Sabines Guerrero; y, ahora con los hostigamientos, aprehensiones, abusos y muertos, padecidos por la Organización Campesina Emiliano Zapata, Región Carranza. Si fuera futbol, podría contabilizarse 3-0 en contra.

Antes y durante los momentos de mayor tensión, gobierno del estado-iglesia católica, bien se puede afirmar que a Sabines Guerrero, su misma gente, lo ha colocado “sólo y de ha pechito”, por ineptitud, torpeza o deslealtad, permiten surgir los problemas, en ocasiones parece que hasta los alimentaran; por incapacidad, complican los escenarios ya de por sí adversos; por insensibilidad y limitada visión, terminan resultando inútiles para construir salidas rápidas y caminos seguros hacia soluciones definitivas; y por si hiciera falta, los “colaboradores”, ya cuando la temperatura de los conflictos amenaza con siniestros mayores, asumen el papel de “galleros” y sólo se dedican a “amarrar y afilar” navajas entre la pesada jerarquía católica local y el gobernador de Chiapas.

Si otra cosa no sucede y Sabines cumple los seis años, todo parece indicar que ésta será para siempre la “metodología” de trabajo, la textura de la relación y el tono del discurso. Por lo pronto, en tres años, el gobierno de Juan Sabines ya se ha empaquetado, sellado y marcado para el juicio de la historia, que no es Televisa, TV Azteca, Magddy Martínez Solimán y menos aún, cualquier actor o animador de televisión.

El capítulo más reciente y delicado que ya cumplió dos meses, entre Estado-Iglesia, todavía no superado del todo, ni en sus partes más visibles, es el originado a partir de las viejas demandas y recientes vejaciones, padecidas por la Organización Campesina Emiliano Zapata, Región Carranza, que no se terminarán en automático al instalar las “mesas de diálogo”, indemnizando a los familiares de los muertos, desmilitarizando la zona y cancelando las órdenes de aprehensión, no, se avanzará verdaderamente, sólo cuando se les garantice, en definitiva, la propiedad de la tierra, se les posibilite condiciones favorables para hacerla producir en beneficio de quienes la trabajen, y modificando de raíz las condiciones sociales injustas que sólo son capaces de producir y reproducir; pobrezas, enfermedades, analfabetismo, desigualdades, hambre e injusticias y sufrimientos, constantes y de todo tipo.

Situaciones sociales como las que padece la OCEZ, Región Carranza, con diferentes grados de maduración y manoseo, se encuentran y reproducen en Chiapas con bastante facilidad, focos rojos no escasean en la entidad y al mismo tiempo, no se observa hasta hoy, una política de Estado que las atienda con responsabilidad, que explore y construya soluciones definitivas, desde una óptica social, no policíaca y mucho menos militar; que acerque a los campesinos a surcos productivos, no a las agencias del Ministerio Público, los tribunales, las cárceles o los panteones.

El Machucón

En la constitución del “Movimiento Nacional Campesino”, realizado el 20 de noviembre en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, ¿qué llamó más la atención?

*Que René Bejarano Martínez, luce mejor cuando sale por televisión, y más, cuando aparece recibiendo un portafolio repleto de billetes, de manos del argentino Ahumada.

*Que la mayoría del presídium, “fueron” o son, empleados del gobernador Sabines.

* Que trajeron empleados y ex empleados del gobierno del Distrito Federal.

*Que en los discursos pronunciados, en su forma y contenido, no hay nada nuevo y guardan demasiada similitud con las arengas priistas.

*Que el centro del presídium lo ocupó José Tanús Piñasoria, representante personal del gobernador Sabines, a quien todos saludaron con excesiva deferencia, casi como suplicándole llevar buenos deseos y afectuosos saludos a su patrón.

*Que al parecer, también conocen y practican acciones de “acarreo”, que sólo participan los de arriba y que el auditorio, solamente lo toman como un elemento para la decoración y los aplausos.

*Que todas las pancartas estaban hechas con la misma letra y colores.

*Que en la constitución del “Movimiento Nacional Campesino” no habló ningún auténtico hombre o mujer de campo, y menos algún invitado.

*Que el 80% de asistentes fueron mujeres, el 20% hombres, que a la “Convención Nacional” no llevaron a más de 400 personas, y que en el “acto nacional”, no estuvieron representados ni el 10% de los estados de la república.

*Que René Bejarano, esposo de Dolores Padierna, trae demasiadas muchachas visiblemente “ejercitadas”, disfrazadas de asistentes en comunicación.

*Que algunos ex regidores hicieron infructuosos actos desesperados por subirse al presídium.

*Que Alejandro Gamboa López, “líder” del PRD en Chiapas, tiene voz y acento de silbato de feria de pueblo.