¡Qué
vergüenza! Es tanta la gritería, música y bailongo
políticos, que se traen en Chiapas las autoridades del estado y municipales,
que hasta pasó inadvertida una información que medios de comunicación
nacionales difundieron el 16 de abril: “La
Presidencia de la República interpone controversias ante la Suprema Corte de
Justicia de la Nación contra los poderes Ejecutivos y Legislativos de Chiapas,
Oaxaca, Michoacán y Sonora, por omisiones y faltas a la reforma constitucional
en materia educativa”. Esto no fue
un piropo dominguero hacia dos de los principales actores de la vida política
chiapaneca, y aun así, después de 8 días de haberse conocido la información, el
gobernador de Chiapas, Manuel Velasco
Coello, y el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso
del Estado, Fernando Castellanos Cal y
Mayor, han guardado silencio vergonzoso. Como acostumbran decir ellos o sus
jilgueros a sueldo: “Esto es histórico”.
Ni
para agradar sirven. Bien se recuerda todavía que,
inmediatamente después de que fue aprobada la Reforma Educativa por el Congreso de la Unión, Fernando Castellanos Cal y Mayor salió gritando en todos los
medios de comunicación al servicio del estado que habían sido el primer Congreso Local en aprobar la
reforma en cuestión, en otras palabras, en arrodillarse ante el presidente Enrique Peña Nieto. ¿Por qué ahora el
presidente de la Junta de Coordinación Política no sale a gritar que han sido
una de las 4 entidades de la República a las que les han promovido controversia constitucional por
omisiones y faltas relativas a la reforma constitucional en materia educativa?,
¿por qué no grita que sus asesores le salieron analfabetas?, ¿por qué ni
siquiera se les ha ocurrido que alguien de sus comunicadores oficiales y
oficiosos, minimice o justifique esta actitud de ignorantes?
El
gobierno de Enrique Peña Nieto exhibe, públicamente, a la administración de
Manuel Velasco Coello. No fue cualquier colaborador
del presidente de la República Mexicana quien informó sobre la controversia
constitucional interpuesta, lo hizo Humberto
Castillejos Cervantes, Consejero Jurídico de la presidencia de este país,
quien dijo, además, que en el caso de Chiapas, “se promovió porque diversos artículos de la legislación local en la
materia, no armonizan con lo dispuesto en la carta magna”. Al gobierno de
Chiapas le impugnaron 8 artículos, entre otras razones, porque regularon
cuestiones que solamente corresponden a la federación. ¿Cómo es posible que todos
los abogados, con grado de doctor,
que rodean y asesoran al gobernador Manuel
Velasco Coello y al presidente de la Junta de Coordinación Política del
Congreso Local, Fernando Castellanos Cal
y Mayor, ignoren que la Ley Suprema
de la Unión es la Constitución y sus leyes generales, por encima de las
normativas estatales?; ¿cómo es posible que el Secretario General de
Gobierno, DOCTOR Eduardo Ramírez
Aguilar, no se haya dado cuenta de un principio jurídico tan elemental, tan
de nivel preescolar?; ¿cómo no se
dieron cuenta que la Reforma Educativa que aprobaron -antes que otras entidades del país-, contravenía a la Constitución
General de la República. ¿Cómo no se
dieron cuenta que al quitarse los pantalones, también se bajaban los calzones?
Controversias
constitucionales. Las controversias constitucionales
interpuestas por la Presidencia de la República en contra de los gobernadores y
Poderes Legislativos de Chiapas, Oaxaca, Michoacán y Sonora, deja claro que 28
entidades hicieron su tarea, obligada, apegándose a los principios
constitucionales y sin reñir con la Reforma Educativa promovida por Enrique Peña Nieto y solamente 4
entidades, entre ellas la nuestra, por
ignorancia o descuido, contravinieron a la Reforma y la Carta Magna. En
esta acción del gobierno federal, llama mucho la atención el que, contrario a costumbres, las
controversias no las presentaron con la discreción de siempre, sino todo lo
contrario: se anunció en rueda de prensa, la hizo el Consejero Jurídico de la
Presidencia de la República y se cuidó su difusión suficiente. ¿Sólo se les
querrá nalguear, regañar, garrotear y exhibir, o falta un correctivo mayor?
Como sea, políticamente, el gobierno de Manuel
Velasco Coello y sus muchachos Fernando
Castellanos Cal y Mayor y el Doctor,
ERA, Eduardo Ramírez Aguilar, quedan muy mal parados, ¿o acostados?, ante
el presidente Enrique Peña Nieto y
el Secretario de Gobernación, Miguel
Ángel Osorio Chong.
El
Órgano de Fiscalización Superior del Congreso del Estado de Chiapas, ¿hizo
cumplir, acordó o pactó? Hace alrededor de dos meses,
se conoció que, oficialmente, el Órgano de Fiscalización del Congreso
Chiapaneco había requerido y multado
a los miembros del Ayuntamiento de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, con 125
mil pesos cada uno por haber incumplido y violentado la Ley de Fiscalización
del Estado. A casi dos meses de conocerse el requerimiento y multa, se ignora si el Ayuntamiento coleto pagó la
multa y cumplió con lo requerido. Se desconoce si el Poder Legislativo fue
capaz de cumplir y hacer cumplir la Ley de Fiscalización; no se sabe si pudo
someter a los integrantes del Cabildo, o solamente acordó y pactó en lo
oscurito. Independientemente de cómo haya quedado la cuestión, es obligación
del Congreso del Estado y las autoridades municipales, explicar los
incumplimientos e informar sobre las sanciones.
Requerimiento
y multa. En el municipio de San Cristóbal de Las
Casas, Chiapas, una acción parecida de requerimiento
y multa por parte del Congreso Local, sólo se recuerda que sucedió en
fechas posteriores a la administración municipal presidida por el Lic. Enoc Hernández Cruz, cuando el
respectivo Órgano de Fiscalización Superior requirió formalmente, que Claudia Miroslava Santiago García regresara a las arcas
municipales, a la tesorería, lo que había cobrado como salario en calidad de Secretaria Técnica del Ayuntamiento,
periodo en que su hermana María Elena
Santiago García -esposa del actual síndico Roberto Arturo Morales Ortega-, se desempeñaba como Síndica del
Ayuntamiento del Lic. Hernández Cruz, debido a que esta acción violentaba la normatividad municipal y
leyes estatales. Hasta el día de hoy, se desconoce si la Verde Ecologista, Claudia Miroslava Santiago García,
reintegró los salarios cobrados, y de esta manera, subsanó administrativamente,
los atropellos legales cometidos. En
otras palabras, si ya pagó o todavía debe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario