Hay que seguir machacándole al gobierno sus asesinatos en contra de jóvenes, como los fusilados de TLATLAYA, en el Estado de México y los desaparecidos de
AYOTZINAPA, Iguala, en Guerrero, aunque a muchos y a muchas les disguste
que se haga todos los días. Parecieran sugerir que ya se deje de
hacer como práctica constante; como si el estado
mexicano, corrupto, explotador y asesino, no llevara décadas, atropellando los derechos del pueblo de México: como si quien escribiera o hablara, lo hiciera para agradarle
a los gobiernos; para conseguir chamba o algún trato
preferente, apoyado en la crítica, la propuesta o la denuncia,
permanentes.
Hay que seguirle con todo, aunque enoje
al oportunista, pero sin descuidar las cuestiones locales, del Estado o
nacionales.
La masacre de Iguala les vino a caer de las mil maravillas a
los ineptos, deshonestos o irresponsables de los ayuntamientos y al gobierno
del estado de Chiapas. Mientras los ojos, oídos y opinión pública están todos puestos en el asesinato de
estado en contra de los estudiantes normalistas de AYOTZINAPA, Guerrero, y en
sus consecuencias sociales; ellos y ellas, en Chiapas, continúan con su comportamiento condenable, más propio de la delincuencia
organizada que de servidores públicos. El gobernador Manuel
Velasco Coello persiste en su locura
verde; aprovecha su cargo para volverse aún más rico e intenta utilizar “todo el poder del Estado" para
quedarse con Chiapas y sus riquezas el mayor tiempo posible, mucho más allá de sus seis años, como lo han
intentado, pero sin éxito, los gobernadores de cuando menos
los últimos treinta años.
Por otro lado, pero hacia el mismo rumbo,
los ayuntamientos y
particularmente los presidentes municipales de Chiapas, se conducen muy
esmerados en dos cuestiones: saqueos descarados de los recursos públicos bajo su resguardo, e intentos por acomodar las condiciones políticas y materiales, necesarias, para imponer a un sucesor que
les garantice obediencia e impunidad a los abusos que han venido cometiendo. Hoy,
todos los Alcaldes Chiapanecos son ricos o más ricos;
ahora, ya todos ellos tienen candidatos para próximo Alcalde. Por cuál color irán, eso ni les
preocupa, estarían dispuestos hasta de pintarse como arco
iris si ello les garantiza el triunfo.
Un ejemplo abusivo y bien cochino. En esto de comportamiento abusivo y
descarado, tienen bien ganado un lugar especial el presidente municipal de San
Cristóbal de las Casas, Chiapas, Francisco José Martínez
Pedrero y su candidato a
sucederle, Carlos de Jesús Zepeda Trujillo. El Alcalde ha incurrido en un sistemático comportamiento deshonesto y de desprecio a leyes locales y
federales, apoyado en las buenas relaciones que su mamá, Dolores Pedrero Corzo, tiene y cultiva con la progenitora del
gobernador Velasco Coello, Leticia Coello Garrido, por un lado; y por el
otro lado, desde su campaña política, el alcalde
de San Cristóbal de las Casas trae colgado a Carlos de Jesús Zepeda Trujillo, un panista que no tendría inconveniente
en ir como candidato por el partido político que le
ordenen y asegure triunfar; en eso tiene sobrada experiencia su familia y,
particularmente, su papá, Francisco Zepeda Bermúdez.
Un chamacón con las mañas del
viejo zorro, eso es el
candidato del Alcalde Coleto, Carlos de Jesús Zepeda
Trujillo, un panista que
se supone, por obvias evidencias, iría como candidato del PRI, con amplias
posibilidades de ganar. Zepeda Trujillo no está improvisando
nada de último momento, en eso ya bien pensó su papá desde antes de que iniciara la administración de Martínez Pedrero; lo ubicó en lugar estratégico en los tiempos de la campaña política municipal y, posteriormente, al iniciar el nuevo gobierno, le creó la Secretaría de Desarrollo Económico y Social, de la cual fue nombrado Secretario. Desde este
especial espacio administrativo, Carlos de Jesús Zepeda Trujillo, con todo el apoyo del Alcalde Martínez, manipula los recursos humanos, materiales, económicos y de información, para posicionarse y promoverse como el
Alcalde siguiente: iniciando campaña política desde hace
más de 25 meses y sin invertir ningún recurso
personal, al contrario, el hecho de que él sea
Secretario, le ha permitido, adicionalmente,
un buen ingreso económico, y a su familia, por la información privilegiada que viene manejando, buenos negocios, presentes y
futuros. Por supuesto, al hotel y restaurant Zepeda Trujillo le ha
significado ingresos nada despreciables. Las facturas emitidas así lo dejan ver y están a buen resguardo.
Un candidato municipal demasiado goloso.
Carlos de Jesús Zepeda Trujillo, por lo que se ha
dejado ver en poco más de 25 meses, es EL MUCHACHÓN que
los apellidos “ilustres" y los empresarios Coletos
metidos en la politiquería, han escogido para no soltar el poder
municipal e intentar ir más allá, para eso lo
han venido trabajando, para conseguirle “las medidas y el
peso" que le garanticen larga vida en la politiquería municipal, estatal y, si es posible, por qué no, nacional. Darle
forma y fachada a UN FUTURO CACIQUE, así lo confían en tertulias muy privadas, en ello trabajan, eso
esperan y los hechos públicos lo confirman. Desean ver a su CHAMACÓN como
todo un señor Alcalde y luego como diputado local, legislador federal, Senador de
la República y en su momento, convertirlo en un fuerte candidato a Gobernador
de Chiapas; para que cuide y multiplique el patrimonio económico de los más ricos de San Cristóbal y si se pudiera, de los más acaudalados de
la entidad chiapaneca, solamente para eso, para hacer más rico al rico, y más miserable al pobre. Como muy bien lo
viene haciendo el gobernador Manuel Velasco Coello.
A Carlos de Jesús Zepeda Trujillo, de la mano de su papá, lo
iniciaron en la politiquería municipal no hace más de 30 meses: lo muestran, lo esconden, lo administran; que
aproveche todo, que utilice a todas y que se exponga a nada que pueda dañar su imagen, su “carrera
política y administrativa". A los actos públicos del
ayuntamiento, sin que le corresponda estar: llega antes que el Alcalde, se
pavonea más que el presidente y se coloca en lugar privilegiado, las fotografías no mienten. Eso sí, cuando asoman problemas o existe el
temor de que éstos se presenten -en la ciudad o en las áreas rurales-, a Zepeda Trujillo no se le ve por ningún lado y si se presenta la oportunidad, corren el rumor de que se
encuentra fuera del municipio. Lo cuidan como pájaro en jaula o
caballo que va a correr, algo así. Desde hace unos 12 meses para acá, aprovechando cualquier pretexto o con la autorización del Alcalde; habla a todas horas, reparte recursos públicos y hasta, frente a todos, usurpa funciones de regidor, síndico y presidente municipal. Al día de hoy, sin
duda, quien más abusiva y perversamente se aprovecha
del cargo para promoverse políticamente, como futuro presidente
municipal, es el Secretario de Desarrollo Económico y Social
Coleto, Carlos de Jesús Zepeda Trujillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario