La vida fácil, la vida loca, la
dulce vida. El hambre de
poder y dinero de los políticos en activo, parece no saciarse nunca. Regidores, ya andan muy ocupados
buscando la manera de colgársele, aunque sea de la bragueta, a cualquier
político que se encuentre por encima de ellos. Presidentes municipales, ya se mueven, bastante preocupados, por
encaramársele al grupo político que consideran con más posibilidades de llegar
a la próxima gubernatura de Chiapas. Diputados
locales, hacen hasta el ridículo, en su esfuerzo prematuro, por trepársele
al gobernador o a algún “grupo pesado”
del centro del país, para ver si de esa manera consiguen una diputación
federal. Diputados federales, son
capaces de dar la espalda y hasta desvestirse, con tal de conseguir una
senaduría. Senadores de la república,
se le arrodillan al presidente de México, a sus apóstoles y a sus respectivos gobernadores, para hacerse de la
gubernatura de sus estados. Los
secretarios de Estado del Gobierno Federal, se conducen como reptiles, arrastrándose, ante el
Ejecutivo del país, para que los incluya en alguna promoción prometedora,
política o administrativa. Y por supuesto, el Presidente de México no descuida su comportamiento complaciente, sumiso, servicial y obediente,
con los gobiernos más poderosos del mundo, para no padecer apuros y
preocupaciones cuando deje el cargo. Después de los negocios mal habidos a la
sombra del poder, esta es la conducta que caracteriza a los políticos viejos y
jóvenes de nuestro tiempo. Nada por el
bien común, todo por el interés personal.
Movimientos mañaneros para el
2018- 2024. Ya es inocultable
que en Chiapas, los políticos se mueven con miras al hombre que podría suceder a Manuel
Velasco Coello. Hombres y mujeres del negocio de la política, ya muestran sus encantos para lo que se ofrezca,
ante los senadores Roberto Albores
Gleason y Luis Armando Melgar Bravo, principalmente. Ya todos los vividores
de la politiquería, se comportan agradando, ofreciendo, traicionando,
imaginando escenarios y nombres, mientras los problemas que amenazan con
profundizar las inconformidades, la inestabilidad, las injusticias sociales, el
hambre y el abandono de las ciudades y el campo chiapanecos, permanecen
descomponiéndose y sin soluciones de fondo. Indudablemente, tarde o temprano,
las dificultades sociales harán crisis mayores y habrán de cobrar cuotas con
más altos sufrimientos a los de siempre, aquellos y aquellas que ya se preparan,
abierta o clandestinamente, para sacudir y sustituir a los malos gobiernos de
los municipios, los estados y este país. Los gobernantes dan la impresión de no
percibir la gravedad de lo que se avecina, o en definitiva, han decidido sólo
disponer de más recursos humanos, materiales, económicos, para la capacitación
de las fuerzas armadas. Como si las
armas fueran capaces de parir comida, techo, trabajo, salud, educación y
bienestar social para el pueblo de México.
El que se fue, el que está y el
que puede llegar. En Chiapas,
el 14 de noviembre, un medio de comunicación estatal dio a conocer que el
senador Roberto Albores Gleason
maniobra con todo al interior del poder Legislativo Local, para dictaminar a
favor del ex gobernador Juan José
Sabines Guerrero, la cuenta pública correspondiente a su administración. Se
informó que el diputado Jesús Alejo
Orantes Ruiz renunció a la coordinación de su grupo parlamentario, porque
no quería prestarse al circo político que pretende echarle tierra y sembrar
olvido e impunidad, a toda la corrupción del ex gobernador Sabines Guerrero. Este arranque de aparente valor y acomodamiento
de pantalones del diputado Orantes Ruiz,
constituye un excelente ejemplo que debe servir, solamente, para corroborar
que: Juan Sabines anda muy apurado
operando con “El diablito”, para
limpiar sus podridas cuentas pendientes, e intentar continuar en la política;
total, para eso le invirtió a todos los candidatos; el senador Roberto Albores Gleason promueve
alianzas y compromisos con todos aquellos y aquellas que le puedan arrimar votos, dinero, relaciones,
conocimientos y capacidad de operación para conseguir la siguiente gubernatura
chiapaneca; y el gobernador Manuel
Velasco Coello, que aún no termina de conocer su oficina, frente a todo
esto, ya en privado, instruye a quién
darle sombra y a quién empujar al sol, cuidando las formas y los tiempos. En estos términos, “cumplen” sus
responsabilidades; el que se fue, el que está y el que puede llegar. Todo gira
alrededor de: cómo recuperar el poder, cómo conseguir poder y cómo ejercer el
poder para estar y perdurar para aprovecharse de los recursos del pueblo.
“CHIAPAS VERDE”, “TIERRA VERDE”,
“GOBIERNO VERDE”. Son
bastantes los meses que lleva haciendo politiquería en la entidad, una fundación denominada “CHIAPAS VERDE”, y ningún instituto
político o autoridad electoral, hacendaria o de gobierno, ha dicho algo al
respecto; al contrario, abiertamente la cobijan, apapachan y entusiasman.
Distribuye aperos de labranza, juguetes para niños y adultos, enseres
domésticos, material deportivo, materiales de construcción, útiles escolares,
promueve a boxeadores, promete obras de infraestructura social y productiva, se
aparece casi al mismo tiempo que los desastres provocados por la naturaleza
para proporcionar ayuda “humanitaria” por todas las regiones y en cualquier
día. ¿Por qué los partidos políticos y las autoridades callan? ¿Quién es el
verdadero padrino de esta fundación?,
¿Cuánto sabe la Secretaria de Hacienda sobre esta organización?, ¿De dónde
provienen realmente, sus inagotables recursos económicos?, ¿Cuál es el origen,
desarrollo y objetivo de Leonardo Rafael
Guirao Aguilar, líder de esta fundación estatal? ¿Será cierto lo que
trasciende; que es un juguetito del gobernador Velasco Coello, como en su momento lo tuvo Sabines Guerrero con su Chiapas
Solidario? Sea como fuere, ya alguien tiene que ponerle “freno, esposas y tela adhesiva” a la
boca de “CHIAPAS VERDE”, que cada
día se parece más a una Secretaría de Manuel
Velasco Coello. ¿O es el promotor de militantes, votos y presencia del
Partido Verde Ecologista Chiapaneco? Alguien debe responder, alguien debe parar
todo, alguien tiene que frenar a la gente verde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario