En tremendos aprietos meterá el ayuntamiento que viene a la mayoría de los medios de comunicación y los comunicadores, si cumple con las leyes y sus responsabilidades sociales.
Ciudadanizar el gobierno coleto, no es facilitar las decisiones, disposiciones y ceder el poder al “consejo ciudadano” de empresarios, al grupo Na Bolom, a “los observatorios” y a “los Canacos” en general.
Ciudadanizar el gobierno, no es crear el “Instituto de Planeación Municipal” atado al ayuntamiento, orientado a los empresarios y entregado a “Rodri”, el señor de las auditorías en el SAPAM.
Ciudadanizar el gobierno municipal, no es ponerse a “tallerear” hasta el cansancio y después lamentar que se acabó el tiempo y las energías.
Ciudadanizar no es sólo, a lo loco, abrir las puertas, escuchar lamentos, “solidarizarse” y levantar minutas.
Un buen principio y guía para iniciar en serio un fuerte proceso de ciudadanización del gobierno municipal, sería cumplir cabal y puntualmente con todo lo que establece el Título VII de la ley Orgánica Municipal, que trata sobre los “Consejos de Participación y Colaboración Vecinal”, en las áreas urbanas y rurales de los municipios.
Con que el nuevo ayuntamiento lograra establecer y activar a auténticos consejos de participación y colaboración en la ciudad y el campo, estaría sentando sólidas bases y suficientes elementos para promover y atraer desarrollo social, ahora sí, orientado a los más necesitados y no como siempre, sólo a los empresarios, sus socios y a quienes viven de la simulación o complicidad.
Ah, y hay que ser cuidadosos si se pretende, en verdad, eliminar el diezmo, no se vaya a convertir en 15 o 18 %. Ya “Carlitos” el síndico municipal, entiende bastante de esto, no vaya a intentar ser útil para ambos lados.
Seguro, si el “consejo ciudadano” de empresarios, “los Canacos”, “los observatorios”, el grupo Na Bolom y “las meras ricas capítulo San Cristóbal”, leen con detenimiento y entienden las dimensiones de los verdaderos “Consejos”, según la ley, se van a espantar y olvidarán para siempre eso de una auténtica ciudadanización del quehacer municipal.
La ciudadanización que conciben, practican y ofrecen todos ellos, es por encimita, de a mentiritas y con el único objetivo de aprovecharse de los recursos públicos, en todas sus formas, fingiendo que es el pueblo quien decide, aprovecha y disfruta.
Ciudadanizar el gobierno coleto, no es facilitar las decisiones, disposiciones y ceder el poder al “consejo ciudadano” de empresarios, al grupo Na Bolom, a “los observatorios” y a “los Canacos” en general.
Ciudadanizar el gobierno, no es crear el “Instituto de Planeación Municipal” atado al ayuntamiento, orientado a los empresarios y entregado a “Rodri”, el señor de las auditorías en el SAPAM.
Ciudadanizar el gobierno municipal, no es ponerse a “tallerear” hasta el cansancio y después lamentar que se acabó el tiempo y las energías.
Ciudadanizar no es sólo, a lo loco, abrir las puertas, escuchar lamentos, “solidarizarse” y levantar minutas.
Un buen principio y guía para iniciar en serio un fuerte proceso de ciudadanización del gobierno municipal, sería cumplir cabal y puntualmente con todo lo que establece el Título VII de la ley Orgánica Municipal, que trata sobre los “Consejos de Participación y Colaboración Vecinal”, en las áreas urbanas y rurales de los municipios.
Con que el nuevo ayuntamiento lograra establecer y activar a auténticos consejos de participación y colaboración en la ciudad y el campo, estaría sentando sólidas bases y suficientes elementos para promover y atraer desarrollo social, ahora sí, orientado a los más necesitados y no como siempre, sólo a los empresarios, sus socios y a quienes viven de la simulación o complicidad.
Ah, y hay que ser cuidadosos si se pretende, en verdad, eliminar el diezmo, no se vaya a convertir en 15 o 18 %. Ya “Carlitos” el síndico municipal, entiende bastante de esto, no vaya a intentar ser útil para ambos lados.
EL PELLIZCO:
Seguro, si el “consejo ciudadano” de empresarios, “los Canacos”, “los observatorios”, el grupo Na Bolom y “las meras ricas capítulo San Cristóbal”, leen con detenimiento y entienden las dimensiones de los verdaderos “Consejos”, según la ley, se van a espantar y olvidarán para siempre eso de una auténtica ciudadanización del quehacer municipal.
La ciudadanización que conciben, practican y ofrecen todos ellos, es por encimita, de a mentiritas y con el único objetivo de aprovecharse de los recursos públicos, en todas sus formas, fingiendo que es el pueblo quien decide, aprovecha y disfruta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario