El Pellizco

Hugo Pérez Moreno, quién se comportaba como el hermano varón que nunca tuvo el gobernador Manuel Velasco Coello, aunque aparente lo contrario y divulgue sus deseos, prematuramente  fracasó y fue empujado feamente de la Secretaria de Educación Pública de Chiapas. Fue un garrotazo mayor, no un reconocimiento a sus habilidades. Debe entenderlo y corregirse, si no quiere ir a la cárcel. Debe saber que ya hay uno que otro buscando sus expedientes negros de 10 años a la fecha.

En el asunto de los bomberos coletos, cada día queda más claro que en esa institución abunda la corrupción e impunidad, pero lo que todavía no ha quedado suficientemente transparentado, es quién dice más mentiras, quién es más bandido, quién es más cínico y quién tiene más hambre de poder: si el regidor Marco Antonio Sánchez Guerrero, la contadora y licenciada Georgina Alcázar Nájera o Jonathan Díaz Gallegos. ¿Quién miente más y quién ha robado más?. Mientras no se haga pública toda la información que aún se reservan las partes, deben comprender que, ante la sociedad, todos ellos quedan como mentirosos y bandidos, justa o injustamente,  cuestión que a Sánchez Guerrero a lo mejor ni le preocupa, a Georgina Alcázar Nájera tal vez ni le quita el sueño y a Jonathan Díaz Gallegos a lo mejor siente que hasta lo vuelve popular.

“El Argentino”. Insistentemente se escucha en las oficinas municipales que Juan Carlos Castellanos González, asistente (mozo de oficio los llaman  en  la Frailesca) del presidente coleto Francisco José Martínez Pedrero, tiene urgentemente que consultar a un otorrinolaringólogo, un internista, un psicólogo y un terapeuta; para empezar se conduce como mareado y sólo es ayudante de alcalde; trata a todos como haciéndoles un favor; se mueve como si este mundo no lo mereciera; gesticula como si la nariz le oliera mal; y su carisma y sencillez, lo hacen parecer argentino. Francisco José Martínez Pedrero, para ayudante de diputado federal, quiere que te busques alguien sencillito y carismático, menos petulante y soberbio.