Reflexiones y Precisiones

APARIENCIA, ENGAÑO, MANIPULACIÓN

Aparentar, engañar y manipular, son tres comportamientos humanos a los cuales constantemente recurren las autoridades de los tres niveles de gobierno de este país, para intentar vender la idea de que saben cumplir con sus obligaciones constitucionales, principalmente: ocuparse del bienestar social de los mexicanos, la vida digna de todo un pueblo. 

Son miles de millones de pesos los que destina el gobierno de Enrique Peña Nieto para -vía publicidad oficial en los medios de comunicación del país y el extranjero-, convencer a sus socios políticos o comerciales, de que están invirtiendo en un lugar seguro para sus capitales, que pueden invertir más y que con las recientes reformas legales, las condiciones serán aún más favorables para el rendimiento de sus inversiones.

De toda esta información que el gobierno mexicano difunde al interior y exterior del país, por lo que se ve, nada importante le creen las grandes potencias económicas mundiales, ellas saben bien lo que sucede en México, están bien documentadas: conocen que son más de 50 millones de mexicanos los que sobreviven en la miseria y en la inseguridad pública y social, y que esa realidad por sí misma, sólo muy temporalmente garantiza ganancia, que en cualquier momento la realidad injusta obligará, por las buenas o malas, a un acomodamiento justo de las fuerzas y de las relaciones sociales. Este es el escenario que se avecina en México, no lo quieren ver muchos, peroes la realidad que prefiguran las condiciones humanas actuales. 

Aunque el gobierno federal despilfarre millones de dólares en “maquillaje y vestuario" para promover y vender a un país bonito, alegre, maravilloso, en paz y sumiso, la realidad es otra. Los millones de pobres ya no aguantan más y a diario emiten señales claras de hartazgo y desesperación; y los ricos quieren más;constantemente demuestran que el sufrimiento humano no es suficiente para frenarlos, si se trata de conseguir mayores ganancias. Esto va a reventar, solo es cuestión de tiempo.

 

APARENTAR, ENGAÑAR Y MANIPULAR, por parte de las autoridades en todos sus niveles, está ocasionando un enorme daño a la sociedad mexicana, la estálastimando y descomponiendo aceleradamente. LA PUDRE. 

Se aparenta el cumplimiento de la función social que a cada uno corresponde. Regidores, síndicos, presidentes municipales, gobernadores y gobernantes en general, aparentando que saben ser representantes populares: aparentando que manejan con honestidad los dineros del pueblo; aparentando que atienden las necesidades de los habitantes; aparentando que todo va bien y que sólo es cuestión de tiempo para que mejoren las condiciones de vida de los ciudadanos. Aparentando que entre los ciudadanos y los ayuntamientos todo es armonía, comprensión, colaboración y agradecimientos, CUANDO ES TODO LO CONTRARIO, cuando es evidente que existe un divorcio, bien marcado, entre pueblo y gobierno; cuando es obvio que los miembros de los ayuntamientos prostituyen el quehacer Municipal; cuando se observa claramente el enriquecimiento ilícito e insultante de quienes debieran ser ejemplo de honradez; cuando ya es inocultable que los gobiernos han perdido toda credibilidad y confianza por parte de los ciudadanos. 

Engaño y manipulación constituyen las herramientas de trabajo preferidas de los gobiernos. En cualquier acción de gobierno, nos topamos con que ahí está el engaño y la manipulación, como si se tratara de un aromatizante, un saborizante o de notas musicales para acompañar una vida diaria satisfecha.

 

GRAVE, SUMAMENTE GRAVE es la conducta oficial de aparentar, engañar y manipular todo lo que las autoridades tienen a su alcance, con el objetivo principal depresentarse y presumir que son gobiernos legítimos, hombres y mujeres que saben cumplir con el deber, instancias donde se escucha, se atiende y se resuelve. Cuando es todo lo contrario.

En una enfermedad social, crónica y degenerativa, han convertido esta conducta institucional; ninguno de ellos parece dispuesto a corregir, detenerse y revertir los daños; y todos los indicios apuntan a que están en toda la disposición de profundizar en las APARIENCIAS, LOS ENGAÑOS Y LAS MANIPULACIONES, mientras la sociedad no se decida por detenerlos, echarlos; por las buenas, por las malas o por las muy malas. 

 

Algo adicional hay que agregar y todo se vuelve aún más grave y preocupante. Estas conductas de APARENTAR, ENGAÑAR Y MANIPULAR, que han logrado llegar y contaminar hasta lo más profundo de las relaciones y el tejido social en su conjunto, ocasiona que en la actualidad, muchos, vean como algo natural y normal incurrir en estas prácticas deshonestas. Casi se llega a entender que el camino correcto para construir una sociedad justa, satisfecha, feliz y en armonía, tiene como premisas y principios, el engaño, la apariencia y la manipulación en todas sus formas. 

En nuestros tiempos, es innegable y ya no pueden ocultar que los gobiernos en México, juegan a las apariencias, al engaño y a la manipulación, pero no solamente ellos, también se volvió una conducta común en hombres y mujeres de empresa, en personas de cualquier ideología e institución político y en aquellos actores que deciden y determinan el desarrollo y la felicidad social. Hoy es común encontrar, que engañe, aparente y manipule: el político, el funcionario de gobierno, el juez, el docente, el investigador, el comunicador, el sacerdote, el notario, el médico, el pastor, el padre, la madre, el taxista, etc. Casi todo ha sido contaminado, muy poco escapa a todo esto que urge sacudir y desechar radicalmente. La solución está en los hombres y mujeres de este país. No hay de otra y no lo harán otros; hay que hacerlo aquí y no esperar a que se decida y haga en el MÁS ALLÁ.