Los “empresarios”, prósperos por herencia o vueltos exitosos desde los puestos públicos, no desaprovechan oportunidad para sorprender a los gobiernos y madrugar a los ciudadanos.
Por los secuestros padecidos, al no poder traer al gobernador, como antes sí lo hacían, hicieron venir al Procurador de Justicia, López Salazar. Se presentaron como “todos los sectores” y no escatimaron en piropos y cortesías corrientes hacia el Gobernador y el Procurador, e inmediatamente las cobraron. Obtuvieron 250 “botones negocio seguro” y algunas otras estrategias para proteger sus intereses y personas.
Procurador, lo engañaron, sólo estuvo usted con los oportunistas y labiosos de siempre. Barrios, fraccionamientos, comunidades, comunicadores y sociedad civil en general, no fueron invitados y menos asistieron, ellos darían una opinión muy diferente y sus solicitudes tendrían expresiones, cara y color, distintos.
Gonzalo Hernández Pérez, nunca ha sido nombrado por los ciudadanos, como su representante, y únicamente por el color de su piel no se le debe aceptar que los representa. Carlos Zepeda Trujillo se comió a todos, se autonombró representante de los ahí reunidos y envió reconocimientos, saludos y agradecimientos a Sabines, como se lo ha de haber aconsejado su papi, Don Paquito Zepeda Bermúdez.
Por los secuestros padecidos, al no poder traer al gobernador, como antes sí lo hacían, hicieron venir al Procurador de Justicia, López Salazar. Se presentaron como “todos los sectores” y no escatimaron en piropos y cortesías corrientes hacia el Gobernador y el Procurador, e inmediatamente las cobraron. Obtuvieron 250 “botones negocio seguro” y algunas otras estrategias para proteger sus intereses y personas.
Procurador, lo engañaron, sólo estuvo usted con los oportunistas y labiosos de siempre. Barrios, fraccionamientos, comunidades, comunicadores y sociedad civil en general, no fueron invitados y menos asistieron, ellos darían una opinión muy diferente y sus solicitudes tendrían expresiones, cara y color, distintos.
Gonzalo Hernández Pérez, nunca ha sido nombrado por los ciudadanos, como su representante, y únicamente por el color de su piel no se le debe aceptar que los representa. Carlos Zepeda Trujillo se comió a todos, se autonombró representante de los ahí reunidos y envió reconocimientos, saludos y agradecimientos a Sabines, como se lo ha de haber aconsejado su papi, Don Paquito Zepeda Bermúdez.
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