En “El Pueblo más mágico de los pueblos mágicos”, en “La Capital Cultural de Chiapas”, inspirados en los cárnicos obtenidos del rastro municipal, ahora para “la cumbre mundial de turismo de aventura”, bien se podrían acuñar algunas frases auténticas y bien fundadas: ¡Del suelo y con moscas, para que la conozcas!, “¡Del estiércol a su paladar!”, y “¡Del piso a su plato, y no barato!”.
¡La carne, sus colores y aromas: el verde del estiércol, el azul de sus enormes moscas y el negro de la sangre descompuesta. Los inconfundibles olores de desechos animales en putrefacción, acompañados por la hediondez que a muy pocos metros emana del río; obsérvala, saboréala, desafíate, desfrútala y no la olvides!
¡La carne, sus colores y aromas: el verde del estiércol, el azul de sus enormes moscas y el negro de la sangre descompuesta. Los inconfundibles olores de desechos animales en putrefacción, acompañados por la hediondez que a muy pocos metros emana del río; obsérvala, saboréala, desafíate, desfrútala y no la olvides!
EL PELLIZCO:
Conociendo la ligereza y el cinismo con que el pediatra Alfonso Torres Aguilar -director de Servicios Públicos Municipales-, acostumbra referirse a sus descuidos o ineptitudes, capaz ahora nos sale con que van bien, pero que, procesos como éste son lentos y que al principio son imperceptibles, pero que van camino a cumplir con la “Norma Oficial Mexicana”. Aunque las fotografías demuestren que están atentando gravemente contra la salud de más de 100 mil ciudadanos y que deben reaccionar urgentemente.
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