Es clara la campaña que en los medios ordena y guía el gobierno de Chiapas; primero, para amacizar al recién creado Ministerio de Justicia y segundo, para remover al ex fiscal Mariano Herrán.
Analizando las expresiones diarias, se aprecia un sadismo informativo innecesario que busca arrinconarlo, persuadirlo, correrlo y si se puede, consignarlo. Él no se a quedado quieto y también a generado declaraciones y movimientos precisos y de peso, sin duda, intentando disuadir y convencer.
Seguro, el ex fiscal dejará “la plaza” y “los ruidos” que se están emitiendo son el lenguaje que utilizan para negociar; cuándo se va, hacia donde, qué tan protegido, y tal vez, hasta el alcance de las persecuciones que se desatarán después de las elecciones…Tal vez.
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