Hace poco, el Gobernador de Chiapas creó la Fiscalía Especial para atender delitos contra periodistas, y nombró a Ignacio Soberano Velasco como Fiscal Especial.
El martes 13, los periodistas, Dalia Pineda Villatoro, Fredy Martín Pérez y Concepción Avendaño Villafuerte, acudieron a Palacio de Gobierno del Estado en busca del Gobernador, para manifestar su inconformidad en contra del Fiscal Especial: argumentaron nítidamente, irresponsabilidades, incapacidades, ausencia de ética, mala fe y dolo.
Desde esta óptica, el Fiscal ha causado más problemas que beneficios: no ha defendido a los periodistas, al contrario, los ha ofrecido y expuesto, torpemente, ante los delincuentes.
Si Juan Sabines Guerrero instituyo “Fiscalía Especial”, para dar tratamiento justo, pronto y profesional, a los delitos cometidos contra periodistas; eligió pésimo Fiscal y debe corregirlo, ya.
Si la Fiscalía tiene como objetivo ser instrumento oficial para manipular indagatorias; si será elemento para ayudar a lavarle las manos al Gobierno; si servirá para estilizarle el rostro a la autoridad; si es para ponerlo a la moda; y, si se utilizará para entregar periodistas a los delincuentes: van bien, pero, ya los periodistas se dieron cuenta, lo exhibieron, lo han denunciado y exigen cambio de Fiscal.
Ojalá se entienda que la “visita” a Palacio de Gobierno, no significa un avance menor, si de hoy en adelante algo sucediera a los comunicadores en cuestión, la responsabilidad ya no será del Fiscal, si no del Ejecutivo Estatal.
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