El viernes 16, se clausuraron en San Cristóbal de Las Casas la CCXLI reunión nacional de la comisión permanente de funcionarios fiscales del país, donde se hizo el lanzamiento nacional del “Programa de Financiamiento de la Construcción de Infraestructura Social en Municipios”, de alta y muy alta marginación.
Llamó la atención, el claro discurso promotor de usura oficial a favor de Banobras, por parte del Secretario de Hacienda; fueron notorias y hasta incómodas, las atenciones e indiscretas medidas de seguridad que rodearon al “hermoso” Agustín Carstens; y, otra vez fue clara la descortesía y maltrato hacia la Autoridad Municipal.
Al Presidente Municipal, Mariano Díaz Ochoa, no le dieron el lugar que le corresponde, lo marginaron en la “fotografía espectacular” del recuerdo, y en ningún material gráfico difundido por el Gobierno del Estado, en sus Medios de comunicación, aparece el Alcalde. Da la impresión que le dedicaron especial cuidado, para ignorarlo, no para promoverlo. Ambos son culpables, uno por abusar y el otro por permitirlo.
Los asesores del Gobernador Sabines Guerrero, deberían sensibilizarlo, haciéndole ver y entender que, la falta de respeto y los menosprecios con que frecuentemente “distingue” a la Autoridad Municipal, no se lo infringe a la persona, si no al pueblo de San Cristóbal, que es a quien representa.
¿Cómo se vería y de qué manera se calificaría que, el Presidente de México Felipe Calderón, viniera a Chiapas a presidir una reunión nacional y, que el Gobernador fuera ignorado, arrinconado en los eventos y que le censuraran su fotografía en los medios?.
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