En el esfuerzo social por definir y construir una sociedad justa, satisfecha y conciente de sus responsabilidades, en todos los ordenes y tiempos, siempre deben jugar un papel determinante los medios de comunicación y los comunicadores.
Debieran encargarse de estimular el interés ciudadano, para ocuparse de la necesidades, responsabilidades y soluciones comunes. Medios y comunicadores, mucho podrían hacer por volver más accesible y transparente la realidad social en que se vive; acercarle mayores y mejores elementos de conocimiento y acción al pueblo, para que sus esfuerzos sean más atinados, oportunos y suficientes.
Medios y comunicadores, debería identificarlos su compromiso social verdadero, que comprometa sus conocimientos, creatividad y sentido común: orientados a satisfacer necesidades sociales, trabajo común y soluciones de fondo.
Pero no, los medios y comunicadores, muy pocos escapan del proceso de descomposición y pérdida de valores que, en México y Chiapas se presentan y padecen. A muy pocos les preocupa buscar, conocer y ofrecer la verdad; a muy pocos les atrae denunciar y exigir; a muy pocos los conmueve y compromete la injusta realidad chiapaneca; y, muy pocos desprecian los “coqueteos” del dinero o la complicidad arrendada .
Hoy, cuando los engaños, las injusticias sociales y corrupciones generalizadas, demandan la participación responsable y certera de los medios y comunicadores, casi todos sólo se ocupan en vestir y promover Gobiernos: ponderan lo inexistente; aplauden lo indigno; ocultan lo evidente; y, disfrazan lo humillante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario