A 13 meses del Gobierno de Felipe Calderón, y aún cuando a los Mexicanos nos han informado de toneladas de droga decomisada, de buen número de delincuentes detenidos, de sumas importantes de dinero asegurado y considerables bienes muebles e inmuebles incautados, al crimen organizado parece no hacerle mella y es evidente que ni siquiera se han atemorizado.
Cotidianamente, por todos los medios se conocen enfrentamientos cada vez más violentos entre la delincuencia organizada y fuerzas federales, AFI´s y el propio Ejército Mexicano. Contrario a lo que podría esperarse, los narcotraficantes, principalmente, cada día dejan más claro que no le temen a nadie y que tienen con qué.
A más de un año del nuevo Gobierno Mexicano y con todo lo que se conoce, no existen suficientes elementos para que Calderón Hinojosa afirme que le está ganando al crimen organizado, al contrario, los criminales no desaprovechan la oportunidad para provocar y demostrar que: todo lo sucedido no les afecta como el Gobierno quisiera; que están en todas partes; y que pueden con todo y todos. No es para alegrarse, pero así es.
Por si existieran dudas, hace unas horas en declaraciones de los Gobernadores de Sinaloa, Nuevo León, Baja California, Sonora y Tamaulipas, dijeron; “el crimen organizado tiene presencia importante no sólo en nuestras Entidades si no en todo el país y ha infiltrado a las corporaciones policíacas Municipales, Estatales y Federales”. Más claro, ni el día.
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